Un grupo de investigadores franceses reunieron a 11 mujeres de aproximadamente 20 años y las enviaron a diferentes playas británicas. Todas llevaban puesto el mismo traje de baño de dos piezas, se les pidió que acomodaran sus toallas en la arena y empezaran a leer un libro. Algunas jóvenes fueron seleccionadas para portar un tatuaje temporal de una mariposa, mientras que las otras permanecieron sin tatuaje alguno.
En promedio 11 hombres se acercaron a las mujeres sin tatuajes durante un periodo de observación de una hora, mientras que alrededor de 26 hombres iniciaron contacto con las que sí estaban tatuadas. Además a los hombres les tomó en promedio 24 minutos acercarse a las portadoras del tatuaje, a comparación de los 35 minutos que les tomó acercarse a las demás.
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Sobre la creencia de que las mujeres tatuadas son más promiscuas, sólo el 28 por ciento de alrededor de 500 hombres entrevistados en las mismas playas, dijo que las mujeres con tatuajes estarían más dispuestas a tener relaciones sexuales en la primera cita.
De hecho, otras investigaciones confirman que los tatuajes en las mujeres no tienen nada que ver con una supuesta promiscuidad. Los expertos afirman que los tatuajes no hacen a las mujeres más promiscuas a los ojos del hombre, sino más accesibles a la hora de entablar una conversación.
mrf