Los beneficios emocionales de tener una mascota en casa son innegables, incluso se han reportado mejorías en algunos padecimientos por tener contacto con animales entrenados para para participar en terapias.
Sin embargo, el debate continúa cuando hablamos sobre los beneficios de salud física y los riesgos de enfermedad que trae a nuestras vidas convivir con ellos.
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De acuerdo al portal Scientific American, la ciencia actual sugiere que aunque el contacto con los miles de microbios a los que nos exponen las mascotas puede ser bueno para fortalecer nuestro sistema inmune, esto sólo funciona para algunas personas. ¿Quieres saber por qué?
Alergias
Al parecer, tener una mascota ayuda a reducir la aparición de alergias, pero sólo cuando la exposición a ella se da en etapas tempranas de la niñez. Cuando sucede durante la adolescencia o la vida adulta, el riesgo a presentar alergias aumenta.
Microbios y bacterias
Algunas mascotas pueden ser portadoras de enfermedades graves, como la salmonela en el caso de las lagartijas y la psitacosis en el caso de los loros, y esto sin hablar de los parásitos y las infecciones por el estafilococo conocido como SARM, que es resistente a los antibióticos comunes.
Salud mental
Incluso en esta área, los beneficios de las mascotas no se pueden generalizar. De acuerdo a un estudio publicado por Sage Journals, con 40 mil participantes suecos, los dueños de mascotas resultaron ser más saludables físicamente que aquellos sin mascotas, pero paradójicamente, también sufrieron más problemas mentales.
Por lo pronto, es claro que tener mascotas nos da beneficios físicos y emocionales, pero la ciencia deberá investigar por qué estas ventajas no son para todos.
RL