Fabrican casas de plástico ecológicas y baratas

El proyecto, de Ramón Espinosa, ofrece hogares que ayuden al medio ambiente.

La construcción de una vivienda tarda cuatro semanas. (Especial)
Adrián Ramírez
Ciudad de México /

El plástico es uno de los principales problemas ambientales de México, ya que anualmente se producen miles de toneladas de este material para distintos usos, como envoltorios, bolsas, envases, tapas, aparatos electrónicos, etc., y que, una vez cumplido su cometido, son desechados a la basura.

Según datos de la organización Greenpeace, solo en Ciudad de México se producen casi 13 mil toneladas diarias de residuos sólidos, de los cuales 123 son de puro plástico.

Por suerte, existen iniciativas, campañas y acciones que tratan de incentivar el reciclado y reutilización de este material una vez cumplió su uso original. Un ejemplo de esto es Ramón Espinosa Ramírez y su proyecto de fabricación de casas de plástico.

Ramón, ingeniero originario de Guadalajara, Jalisco, es CEO de Ecoplástico Ambiental, empresa que se dedica a la fabricación de muebles con “madera plástica”, que no es otra cosa que plástico reciclado molido en máquinas.

El proceso para edificar una vivienda de esta naturaleza comienza con el molido del plástico, que una vez queda en hojuelas diminutas se colocan en placas para ser horneado a 220 grados.

Posteriormente, una vez retiradas del horno y mientras se van enfriando, se aplica un proceso de compactación, terminando así con la obtención de unas placas sólidas que pueden ser utilizadas como muros. Ramón asegura que la edificación de una vivienda de 50 m² tardaría unas cuatro semanas, y que en promedio se emplea 2.7 toneladas de plástico. En cuanto al diseño y estructura no hay restricciones.

Y ADEMÁS

MÁS FRESCO QUE EL CONCRETO

En estos momentos, Ecoplástico Ambietal solo trabaja y distribuye en los estados de Colima y Jalisco, aunque ya están en la búsqueda de inversionistas para poder desembarcar a más ciudades del país. “A veces la gente tiene miedo de que estas casas sean de mala calidad, pero son muy cómodas, principalmente en temporadas de calor”, dice el ingeniero.