“Así se ve mi diálogo interno”, se lee en una imagen llena de edición protagonizada por tres fotos de un hipopótamo bebé que grita al aire, este es solo uno de los miles de memes que circulan en redes. Rechoncho, de patas cortas y piel perfecta, no se requirió mucho esfuerzo para que el animal se convirtiera en uno de los favoritos de internet.
Moo Deng nació en julio de este año en el Zoológico abierto de Khao Kheow, Tailandia. Su presentación en Facebook detonó su gran popularidad en el país, sin embargo muy pronto traspasó fronteras: videos de ella transmitidos en partidos en Estados Unidos, marcas utilizando su imagen e incluso playeras con su rostro han contribuido a que, a su corta edad, la hipopótamo sea conocida en distintas partes del mundo.
- Te recomendamos De un dedo extra a su comida favorita: cinco cosas que no sabías de Xin Xin, la última panda mexicana Ciencia y Salud
Estos son cinco datos curiosos para conocer más sobre ella y su especie, que actualmente se encuentra en peligro de extinción.
El nombre y otros datos sobre ella
El nombre de la hipopótamo se eligió mediante una encuesta realizada en Facebook. Moo Sap y Moo Daeng estaban dentro de las oposiciones, sin embargo, la mayor parte de los casi 20 mil votantes que participaron en la elección se decantaron Moo Deng, que en tailandes significa “cerdo saltarín”.
Las crías como Moo Deng pesan entre 4.5 y 6.5 kilos al nacer, pero crecen rápidamente: gana entre 300 y 600 gramos al día. Usualmente las madres esconden a sus bebés las primeras tres semanas para protegerlos de depredadores y el sol.
Su abuela es la hipopótamo más vieja de Tailandia
Moo Deng es descendiente de Malee, una hipopótamo que recientemente celebró su cumpleaños número 59, lo que convierte a la matriarca en la más vieja de su especie en Tailandia.
De acuerdo con datos del Zoológico de Toronto, la esperanza de vida de la versión de bolsillo de los hipopótamos es de entre 30 y 50 años.
La exposición le ha traído problemas
El frenesí ocasionado por la bebé hipopótamo —probablemente alentado por los videos en los que se le puede ver ‘mordiendo’ a su cuidador con una boca aún sin dientes, corriendo por su hogar o en los que se resiste a tomar un baño— resultó perjudicial para su bienestar.
Y es que, al convertirse en estrella de Tailandia, el número de visitantes en el zoológico se disparó. Se llegaron a reportar vídeos de las personas arrojándole comida o salpicando agua para despertarla.
Dada la situación, el zoológico tuvo que emitir un comunicado en el que reprobó las acciones de los visitantes y llamó a proteger y garantizar un entorno seguro y confortable para los animales.
“Estos comportamientos no sólo son crueles sino también peligrosos", dijo Narongwit Chodchoi en un comunicado publicado en sus redes.
Bloqueador solar incorporado y otros datos sobre los hipopótamos pigmeos
Podría pensarse que los hipopótamos pigmeos son la versión miniatura de sus parientes más comunes, los hipopótamos de río: ambos son originarios del mismo continente, aunque se distribuyen en hábitats diferentes.
Los dos comparten rasgos, como por ejemplo, que sus orejas y fosas nasales funcionan como válvulas que se cierran herméticamente para sumergirse bajo el agua.
Además, ambos cuentan con una piel suave, fina y de apariencia gomosa. Al ser sensibles al sol, su dermis evolucionó de tal forma que puede supurar una especie de líquido espumoso que les permite estar siempre húmedos, brillantes, libres de quemaduras solares, infecciones y deshidratación.
Sin embargo, aunque hay más de una coincidencia, son varias las diferencias entre ambas especies, especialmente en cuanto a temperamento.
De adultos miden entre 1.5 y 1.75 metros de longitud y entre 75 y 100 centímetros de altura. Mientras que su peso puede ir de los 180 a los 270 kilogramos, es decir, son bajitos y rechonchos, aunque son mucho menos corpulentos que sus parientes, de hecho, pesan casi diez veces menos que sus parientes.
De acuerdo con el zoológico de San Diego, poco se ha investigado sobre el comportamiento de estos animales en vida salvaje ya que suelen ser muy esquivos: prefieren estar en solitario, escondidos en ríos y pantanos.
Sus grandes bocas dotadas de poderosos colmillos les permiten alimentarse de hierbas, hojas y raíces de la zona tropical de África occidental.
Se ha documentado que para defenderse de sus depredadores suelen abrir mucho la boca, como si estuvieran dando un gran bostezo, cuando eso no funciona pueden optar por ahuyentar al enemigo encabritandose, embistiendo o incluso sacudiendo la cabeza.
Dado que son sumamente tímidos, tienden a ser silenciosos, aunque en algunas ocasiones (y como ha dejado calor Moo Deng) son capaces de emitir ruidos que van desde gruñidos bajos hasta chillidos agudos.
Según el zoológico de San Diego, el lenguaje corporal es importante dentro de la comunicación de los hipopótamos.
“Las señales de sumisión incluyen tumbarse boca abajo y orinar mientras se mueve lentamente la cola. Si se alarma, el hipopótamo suelta el aire con un fuerte resoplido”, explica.
En peligro de extinción
Pese a que Moo Deng llena hoy las redes con su simpático rostro, lo cierto es que forma parte de una especie en peligro de extinción, según lo declarado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. De acuerdo con Fauna & Flora, una organización internacional de conservación, el número de hipopótamos ha ido disminuyendo drásticamente debido a principalmente a la pérdida de hábitat y la caza.
Nadie sabe cuántos de ellos quedan en libertad. Actualmente, la mayoría de estos animales se concentra en Liberia, aunque aún sobreviven algunas poblaciones en Costa de Marfil, Guinea y Sierra Leona. Se cree que una subespecie que antes se encontraba en Nigeria está extinta.
LHM