Ante la contingencia de salud, el trabajo de quienes mantienen la limpieza de la ciudad es más importante que nunca, en León el Sistema Integral de Aseo Público (Siap) no ha dejado de brindar el servicio de recolección de basura a más de 386 mil viviendas diariamente.
Sin embargo la naturaleza del empleo de los llamados "recolectores" los vuelve un foco vulnerable al contagio del covid-19 y otras enfermedades.
"Compañeros, nosotros no podemos suspender nuestras labores, ya que nosotros tenemos que mantener una ciudad limpia como lo es León" exhorta Alejandro, recolector del SIAP.
Por lo cual, previo inicio de labores, a todo el personal le es entregado equipo de protección consistente en guantes, cubrebocas y desinfectante, personal de salud revisa su temperatura y estado físico. Es obligatorio el lavado de manos y uso de desinfectante antes y después de su jornada.
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Aunque estas medidas preventivas aminoran el riesgo, la dirección de Aseo Público aún no ha implementado un programa que especifique el tratamiento a desechos de los hogares, los cuales pudieran ser potenciales focos de contagio de covid-19 para sus empleados.
Por lo que en este sentido, se ha hecho especial énfasis en que el personal de recolección tiene prohibido realizar separación de residuos y toda bolsa de basura debe ir integra al camión, debido a que no se tiene la certeza de si en algún hogar pudiese existir una persona contagiada.
"Nuestra labor no puede detenerse, porque nosotros somos los que levantamos el reciclaje y levantamos la basura en sus hogares. Así que nuestro trabajo es importante para todos ustedes, como el que todos ustedes también hagan el reciclo, separen y nosotros nos encargamos del resto" comentó Francisco Martínez, recolector.
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Como una medida extra, ante la actual contingencia, se a solicitado a la ciudadanía el rociar con agua y cloro o alcohol sus residuos, para que el personal al momento de tener contacto con la bolsa evite cualquier contagio.
¿Y la protección de los recuperadores?
Si bien el SIAP ha implementado un programa de recuperadores urbanos, el cuál tiene el objetivo de dignificar el trabajo de los denominados "pepenadores," entregándoles un kit de identificación consistente en chaleco, gorra y credencial, la institución no puede obligar al uso de guantes u objetos de protección a estos, debido a que no son sus empleados y en la mayoría de los casos comentan no tener la solvencia económica suficiente para poder adquirirlos. Lo cual vuelve a los más desprotegidos, un sector vulnerable y propenso a contraer el virus.