El avance de ómicron, la más reciente variante del virus SARS-CoV-2, y su alta tasa de contagios, incluso de aquellos que anteriormente ya se infectaron, nos obliga a todos a tomar medidas de prevención para evitar padecerlo.
Primero que nada debemos de recordar que nos contagiamos al respirar aire infectado (aerosoles con virus) exhalado por algunos de los infectados al hablar, toser o estornudar.
Por ello debemos de mantener las medidas establecidas por las autoridades sanitarias, entre ellas portar mascarilla y mantener sana distancia en todo tipo de ambientes, sean estos cerrados, semicerrados o abiertos.
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En el caso de la mascarilla (cubreboca) debe estar colocado hasta el puente de la nariz y por debajo de la barbilla. Cuidando que se ajuste perfectamente para no dejar huecos.
En los espacios donde nos encontremos, una medida básica es mantener una correcta ventilación en todo momento.
Debemos de tener presente que es posible estar expuesto a una reinfección después de tocar una superficie en la que se hayan depositado secreciones respiratorias por toser o estornudar en ellas y después tocar la nariz, ojos o boca.
Ante sospecha o con síntomas de contagio, como tos, fiebre, dolor de garganta, flujo nasal abundante, ronquera, dificultad para respirar, fatiga, náusea o vómito, entre algunos otros, estén o no vacunados, o si ya se tiene confirmado que es positivo a covid-19, deberá de aislarse de forma voluntaria por siete días.
La persona contagiada necesitará su propia habitación con buena ventilación. Preferiblemente con ventana a la calle y un baño de uso exclusivo.
Tendrá que mantener la puerta cerrada y el paciente tiene que salir lo menos posible o solo para lo básico. Se sugiere usar un cubo para basura con tapa y el empleo de una bolsa con cierre hermético para colocar los desechos.
En caso de que la persona enferma requiera salir de la habitación deberá de usar mascarilla y desinfectar sus manos antes y después de cualquier actividad. También deberá de mantener más de un metro de distancia con el resto de las personas.
Asimismo, deberá monitorearse la oxigenación, y si ésta se encuentra por arriba de 90 y no presenta dificultad respiratoria ni fiebre alta evitar salir a hacer una prueba de covid, dado la transmisión intensa de esta variante.
En caso de que exista fiebre alta, persistente por más de dos días o la oxigenación se encuentra por debajo de 90 por ciento, acudir a una unidad de salud para recibir orientación y atención.
La limpieza es primordial y quien realice esta tarea deberá llevar mascarilla y guantes. Se recomienda limpiar cada día las superficies que más se tocan y lavar los trastes a más de 60 grados centígrados.
Entender que la vocalización (hablar, gritar, cantar) está fuertemente asociada a la transmisión, por ello se invita que puedan comunicarse dentro de su hogar a través del teléfono móvil. Aproveche este medio para darle apoyo emocional.
La ropa, toallas y los enseres de cama del paciente deberán de lavarse aparte a entre 60 y 90 grados centígrados. Para limpiar el piso, usar una solución que contenga 5 cucharadas (1/3 de taza) de cloro por galón (3.8 litros) de agua.
Lávese las manos a menudo con agua y jabón. No reutilice elementos de limpieza, guantes ni mascarillas. Use bolsas de plástico cerradas para los residuos.
La persona infectada deberá evitar el contacto con sus mascotas porque sobre su pelo pueden quedar partículas de virus y contagiar a otras personas.
Un buen descanso permitirá que el cuerpo tenga las condiciones necesarias para recuperarse, mantenerse hidratado y con una buena alimentación son un factor clave.
CHM