Las salsas picantes embotelladas suelen acompañar varios platillos de la gastronomía mexicana como botanas, tostadas, mariscos y esquites. Sin embargo, el consumo frecuente de este producto puede generar problemas de salud.
La salsa picante procesada o embotellada tiene un exceso de sodio, según un estudio realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). Por lo tanto, los expertos recomiendan la ingesta moderada de este producto por sus ingredientes.
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A continuación, te explicamos las afecciones que puede provocar el alto consumo de los ingredientes que contienen las salsas picantes embotelladas.
¿Cuáles son los efectos nocivos de consumir frecuentemente salsa picante embotellada?
Problemas digestivos: El consumo excesivo de salsa picante puede causar el revestimiento del estómago y el intestino, acidez estomacal, reflujo ácido o en los casos crónicos gastritis. Además, puede provocar diarrea o malestar intestinal, especialmente si no están acostumbradas a alimentos picantes.
Aquellas personas que ya tienen condiciones gastrointestinales, como el síndrome del intestino irritable o enfermedades inflamatorias del intestino, podrían experimentar síntomas más intensos al consumir este producto.
La mayor parte de las salsas envasadas contienen ácido acético, un compuesto que puede causar quemaduras en la piel y daños en el aparato digestivo.
Aumenta el riesgo de dañar el esmalte dental y las caries.
Presión arterial elevada: Las salsas picantes contienen altas cantidades de sodio, lo que puede contribuir a la hipertensión arterial en individuos sensibles a este elemento.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) indica que el exceso de sodio está asociado con accidentes cerebro vasculares y padecimientos del sistema cardiovascular.
Reacciones alérgicas: La manipulación de chiles o la exposición a la capsaicina de la salsa picante puede causar irritación en la piel y los ojos, especialmente si se tocan estas áreas después de manipular los chiles.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda moderar el consumo de sodio de alimentos procesados como las salsas embotelladas en tus alimentos del día a día.