En México la institución Salud Digna ha sido acusada de “competencia desleal” por ofrecer estudios de calidad para la detección de cáncer, como mastografía y papanicolau, 90 por ciento más baratos que el resto de las instituciones privadas, contribuyendo a reducir las brechas de desigualdad en el acceso a la salud entre los sectores más pobres, informó su director general, Juan Carlos Ordóñez.
En entrevista, Ordóñez refirió que Salud Digna, una asociación civil sin fines de lucro, trabaja bajo el lema “La salud es para todos”, y por ello ofrece servicios de prevención y diagnóstico de calidad a precios verdaderamente accesibles, para beneficiar a las familias de diversos segmentos socioeconómicos, con estándares de calidad internaciones y en tiempos de entrega cortos.
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Gracias a ese esquema, Salud Digna contribuye a la disminución del gasto nacional de salud, siendo también una de las organizaciones que más personas atiende en México, después de IMSS, Issste y Seguro Popular.
El director general de la institución destacó que durante 2017 atendieron a 8.1 millones de personas con análisis de cáncer, así como por problemas cardiacos y visuales, además de embarazos y de densitometría ósea (estudios de osteoporosis).
Y en 2018, abundó, “proyectamos ayudar a alrededor de 10 millones de personas más. Según cifras avaladas por la Subsecretaría de Prevención de la Secretaría de Salud federal, alrededor de 10 por ciento de los diagnósticos de cáncer de mama registrados en México en 2017 tuvo su punto de origen en una mastografía realizada en Salud Digna”, resaltó.
Casi 5 mil colaboradores trabajan en la institución. “Según la Fundación Rockefeller, cada año 25 millones de familias se convierten en nuevos pobres porque uno de sus integrantes pierde la salud”, señaló.
Por ello, recordó, en 2003 se fundó Salud Digna, con la misión de contribuir a combatir las consecuencias catastróficas que conlleva la pérdida de la salud para las familias, especialmente las de menores recursos, a través de crear mayor accesibilidad a estudios de diagnóstico que faciliten la prevención y detección oportuna de enfermedades.
“Como todas las organizaciones no lucrativas, somos auditados por muy diversas vías, tanto públicas como de entidades como la Junta de Asistencia Privada. Yendo aún más allá, cada año nos dictamina uno de los despachos internacionales más prestigiados del mundo, hemos sido auditados y reconocidos por organismos multilaterales como el banco Interamericano de Desarrollo, y el año pasado recibimos el Premio Nacional de Calidad”, refirió Ordóñez.
Los servicios que brinda se enfocan en la prevención y detección de las principales enfermedades crónicas degenerativas (cáncer, diabetes y cardiovasculares).
El las más de 80 instalaciones que tienen en 40 ciudades cuentan con laboratorio clínico, ultrasonido, erxamen de la vista, rayos X, mastografía, electrocardiograma, papanicolaou, densitometría ósea, consulta nutricional, resonancia magnética y tomografías.
“Nuestro modelo de intervención es considerado revolucionario e innovador, porque puede contribuir a la política pública de Salud, es por eso somos un caso de estudio en la Harvard Business School y el Ipade”, señaló.
“También contamos con la única clínica exclusivamente de diagnóstico acreditada por Joint Commission International, la más prestigiada entidad certificadora de salud en el mundo, y somos la red de laboratorios clínicos con más sucursales certificadas con la norma ISO 15189”, comentó.
Desde el punto de vista de Ordóñez, “la salud es un derecho fundamental y un aspecto altamente sensible en una sociedad. Creemos que no hay argumento alguno que se sostenga para limitar el rol que puede tomar la sociedad organizada en mejorar la calidad de vida de las personas.
“Hemos logrado cada vez mayor eficiencia gracias al trabajo conjunto y de largo plazo con algunas de las empresas multinacionales más importantes de las industrias en las que nos desarrollamos, y el empleo tecnologías avanzadas, algunas de ellas únicas a escala Latinoamérica”, aseguró Ordóñez.
El especialista comentó que acaban de hacerse acreedores del certificado Institucionalidad y Trasparencia que otorga el Centro Mexicano para la Filantropía, en el nivel máximo alcanzable para las organizaciones no lucrativas que buscan lograr un nivel de excelencia. Dicha certificación reconoce a aquellas organizaciones sin fines de lucro que cumplen con los más altos estándares de transparencia en su funcionamiento, fuente y destino de recursos, impacto social.
“Seguiremos trabajando fuerte en nuestra misión de impacto social para lograr hacer de México un ejemplo mundial en prevención y detección temprana de enfermedades”, concluyó.