La farmacéutica francesa Sanofi informó que, a través de sus dos plantas de producción, una ubicada en Ocoyoacán y la otra en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, fabricarán, por primera vez, la vacuna tetravalente contra influenza estacional a gran escala, más de 50 millones de dosis que surtirán tanto la demanda sanitaria de la población mexicana como la de otros países latinoamericanos.
André Soresimi, director general de vacunación de Sanofi México, explicó que la vacuna será una realidad hasta 2024 ya que falta obtener el registro de buenas prácticas de manufactura de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y, como segundo paso, buscarán el registro sanitario de la nueva vacuna que contendrá, en una sola dosis, los linajes gripales: Victoria y Yamagata.
Contener estos linajes significa proteger a las personas contra los virus A (H1N1, H3N2) y el tipo denominado B (Victoria y Yamagata), de acuerdo con especialistas.
La planta fue construida como parte del convenio que tiene Sanofi con la paraestatal Laboratorio de Biológicos y Reactivos de México (Birmex), el cual será equipado con trasferencia tecnológica y, además, podrá manejar este espacio 10 años después, expuso Soresini.
Por lo demás, en 2024, México se convertirá en el sexto país en el mundo y el primero de América Latina en producir, de principio a fin, una vacuna tetravalente contra la influenza.
En esa planta ya se produjeron 2.5 millones de dosis “100 por ciento mexicanas”, aunque no para uso humano, sino como parte de la fase de estabilidad en lo que completan todos los procedimientos de seguridad con la Cofepris.
La particularidad de ambas plantas de producción, llenado y empaque, están integradas con inteligencia artificial, realidad virtual y lo más sofisticado de la tecnología. “México tendrá una capacidad de producción total de esta vacuna”, mencionó.
La inversión es de alrededor 5 mil millones de pesos aportados exclusivamente por Sanofi, la cual, contratará a alrededor de mil trabajadores mexicanos para fabricar la vacuna contra la influenza estacional cuadrivalente.
Las vacunas contra la influenza estacional solo incluían, conforme con los reportes de la cepa dominante emitidos por la Organización Mundial de la Salud, el clado Victoria o bien el Yamagata.
Ahora, Victoria y Yamagata estarán en una misma dosis como parte de una estrategia para reducir cualquier cambio virológico que pueda resultar peligroso, hasta pandémico, para la población.
“Existe un elevado riesgo de que la próxima pandemia sea por influenza”, resaltó Soresimi, tras destacar que, antes de iniciarse el proceso oficial de vacunación, como suele sucede en el octubre, ya se contabilizaban 15 mil casos sospechosos con influenza en México.
Alejandrina Malacara, directora Médica de Sanofi Vacunas, detalló que “en nuestra planta de Ocoyoacac, Estado de México, manos mexicanas se encargan de comenzar el proceso de fabricación de este biológico y una vez que el antígeno está listo, se almacena para su envío a nuestro sitio industrial en Francia, donde se lleva a cabo la formulación, el llenado y empacado de los viales con los antígenos producidos en nuestro país”.
“Finalmente, se realiza un estricto control de calidad para garantizar la seguridad y eficacia de la vacuna, que regresa a México para cumplir el proceso de autorización ante las autoridades correspondientes. Nuestro compromiso no termina aquí, seguimos trabajando nuestro nuevo sitio industrial de vacunas en Cuautitlán Izcalli, donde a partir del 2024 se producirá la vacuna contra influenza 100 por ciento mexicana: producción de antígenos, formulación, llenado y empacado, lo que permitirá hacer más eficientes los tiempos de producción”.
México cuenta con 34 millones de dosis
México, recordó, cuenta con 34 millones de dosis de vacunas contra la influenza estacional para proteger a sectores vulnerables, a niños de seis a 59 meses, adultos de 60 años y más, mujeres embarazadas, personal de salud y población de cinco a 59 años con comorbilidades, como diabetes, VIH o cáncer, entre otras.
Se trata de una dosis que, a decir de Luis Alcocer Díaz, especialista en cardiología y director general en el Instituto Mexicano de Salud Cardiovascular, protege, en caso de contagiarse, en un 90 por ciento a la persona en desarrollar neumonía, en caer en hospitalización o de fallecer por complicaciones.
Para Sarbelio Moreno Espinosa, director de Enseñanza y Desarrollo Académico del Hospital Infantil de México Federico Gómez, “se van a retomar las estaciones de influenza como solían presentarse, y con la relajación cada vez más amplia de las medidas sanitarias contra covid-19; será muy probable que se contribuya al aumento de casos de influenza durante la temporada 2022-2023. Cada día se retoman con mayor intensidad las actividades cotidianas de manera normal y eso requerirá que estemos protegidos”.
Moreno, también especialista en infectología pediátrica, destacó que es fundamental que quienes forman parte de los grupos de población en riesgo acudan a su centro de salud para recibir su vacuna.
La influenza es una enfermedad viral que afecta al sistema respiratorio y se caracteriza por la aparición de fiebre muy alta, dolores musculares, tos seca y dolor de garganta; y es más que un resfriado común, como muchos lo piensan. En casos extremos, el riesgo de sufrir un ataque al corazón a la semana de haber contraído la infección es 10 veces mayor.
Dosis como protector cardiovascular
Luis Alcocer Díaz, especialista en cardiología y director general en el Instituto Mexicano de Salud Cardiovascular, informó que se está corriendo un ensayo, no concluyente, sobre cómo la dosis contra la influenza estacional es un protector cardiovascular.
“Si bien, el riesgo varía en función del estado de salud de cada persona, está comprobado que la influenza genera una inflamación en los pulmones que puede expandirse a otras partes del cuerpo y desencadenar accidentes como eventos cardiovasculares, neumonía o crisis diabética. Afortunadamente, con la aplicación de la vacuna contra influenza, el riesgo de presentar un infarto al corazón por complicaciones de la enfermedad puede reducirse hasta un 45 por ciento”, indicó.
En México, cada vez más personas fallecen por causas cardiovasculares durante la temporada de influenza que en otros periodos del año. Generalmente, la vacuna contra influenza no forma parte del control habitual de las personas con problemas cardiovasculares o que ya han sufrido un infarto al corazón, sin embargo, es urgente que tanto especialistas como la población con estas características, tengan muy presente esta situación y acudan a vacunarse.
La mejor defensa contra este padecimiento es la vacunación contra influenza. Al tratarse de un virus de fácil mutación, cada año se generan nuevas cepas y la vacuna se desarrolla con base en las de mayor circulación y riesgo de contagio para la población. De ahí la importancia de que, al inicio de cada temporada de vacunación, las personas acudan a su centro de salud más cercano a actualizar su esquema para estar protegidos.
LP