Enfrentarse al covid-19 ya no es una situación que dependa de la edad de la gente, pues niños, jóvenes, adultos y mayores viven la odisea de estar contagiados, mientras sus familiares esperan noticias afuera de algunos hospitales.
MILENIO dialogó con los familiares que esperan noticias enfrente del hospital Metropolitano, uno de los cinco nosocomios que se encuentran ya saturados de pacientes en el país en la llamada tercera ola de la enfermedad, de acuerdo con la Secretaría de Salud federal.
Aunque a simple vista no se alcanza a ver que esté atestado, el edificio del hospital se encuentra atendiendo a pacientes hasta en los pasillos, a decir de Manuel de la O Cavazos, secretario de Salud en la entidad.
Y es que en Nuevo León ayer se reportaron mil 9 personas hospitalizadas por SARSCoV-2, de las que 856 son pacientes confirmados y los otros 153 casos todavía son sospechosos.
Así, el hospital de la avenida López Mateos, en la colonia Floridos Bosques del Nogalar, en el municipio de San Nicolás de los Garza, se ha convertido en sede de historias de enfermedad de los nuevoleoneses.
En esta ocasión MILENIO le presenta el caso de tres pacientes, dos de las cuales enfermaron tras viajar a otros estados de la República, mientras que la tercera persona se contagió, a decir de sus familiares, al estar en un casino.
Dos semanas después de viajar a Cancún
El primer caso es el Ana Margarita Méndez, de 21 años, quien se contagió 15 días después de irse de viaje a Cancún, y solo 20 días antes de viajar, su madre y su hermana menor también habían enfrentado el virus.
“Mi hija se contagió, ni idea dónde haya sido porque yo ya traía, pero me recuperé. Ella se fue a Cancún y regresó, pero no creo que allá (haya sido el contagio), porque estuvieron dos semanas aquí.
“No sabemos ni dónde, mi hija ni sale a antros ni nada de eso; ya bendito Dios está mejor, tiene oxigenación de 83, y ya le pusieron oxígeno, no la intubaron, nada más le están dando su tratamiento, estudios y que no hayan tenido filtración en sus pulmones.
“El domingo me la traje y está ahorita con dos (unidades) de oxígeno, lo mínimo, nada más, porque teníamos primero 10, luego 5 y ahorita 2 de oxígeno, y me pidieron los dos donadores. Estoy pidiendo informes a los médicos, pero me dijeron que está bien, la pasaron a piso y bendito Dios ahí la llevamos”, narra su madre Ana Margarita Flores Regino, vecina del municipio de El Carmen.
Regresa con síntomas tras visitar Tuxpan
Sentado en la banqueta frente al hospital Metropolitano, Carlos Eduardo Padilla, vecino del municipio de Ciénega de Flores, espera noticias de su esposa, María Isabel Calderón Ortiz, quien se contagió de SARS-CoV-2 tras un viaje a Veracruz y llegó a esa clínica por problemas de oxigenación.
“Mi esposa es la que está infectada, tiene 38 años, ella salió a Tuxpan y llegó infectada, ahí se pudo haber contagiado. Aún no me han dicho nada de ella.
“Se supone que no está (intubada), pero no me han informado nada, aún no tiene vacuna, y siento desesperación. Yo me siento bien, no estoy contagiado, pero ella empezó con un dolor de panza y la llevé a checar, y luego se le quitó.
“El lunes empezó con el pecho de que no alcanzaba a respirar, y de la clínica de Ciénega de Flores nos mandaron para acá. Nos vinimos en taxi, me la traje porque ya le estaba fallando la oxigenación”, explica su esposo, habitante de la colonia Santa Lucía, en Ciénega de flores.
Se infectó en casino y ahora está intubado
Eloísa Cruz, vecina de la colonia Francisco Villa, en el municipio de Juárez, es esposa de Gerardo Garza, de 53 años, quien se infectó presuntamente tras acudir a jugar al casino, por lo que acudió al hospital a firmar autorizaciones.
“Yo creo que fue en el casino, primero empezó a sentirse como si tuviera cansancio y ese día había tomado, pensamos que era parte de la tomada y resultó que empezó a tener más síntomas, eran leves, la tos muy baja y no traía temperatura ni vómito. Lo llevamos a consultar y le dimos medicamento; el martes nos lo llevamos a consultar y el miércoles teníamos que hacerle la radiografía y prueba covid, donde salió positivo.
“Andaba muy hiperactivo, desesperado, nervioso, esos síntomas le empezaron afectar, pero me dieron la opción de tenerlo que intubar y el viernes por la noche lo intubaron. Ayer (lunes) me dijeron que estaba con el ventilador en 50 y el sábado y domingo en 60. Hoy (martes) tuve que venir a firmar por un cuadro renal y le van a hacer una diálisis, tiene problemas de azúcar porque él es diabético, pero me dan muchas esperanzas”, relató Eloísa.