El teporingo o conejito de los volcanes, especie endémica del centro del país, está en peligro debido a la rápida expansión urbana de CdMx, advirtieron expertos de la UNAM.
La especie exclusiva de la fauna mexicana, de tamaño pequeño con extremidades cortas, orejas y redondeadas, pelaje denso amarillo y dorso negro, se alimenta principalmente de hierbas como el zacatón, mermadas en la zona ante el embate del crecimiento urbano, su principal amenaza.
“Vive en una de las regiones más complicadas, en las cercanías de una urbe tan grande como CdMx, donde la expansión ha mermado la cobertura herbácea densa, su alimento y refugio primordial ante depredadores como el lince, coyote, comadreja, búho, serpiente de cascabel y ahora perros o gatos domésticos”, explicó Óscar González, veterinario de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán, en un comunicado de la UNAM.
El investigador considera que “no existe otra especie igual en el mundo”, y refirió el libro de Francisco Romero y Alejandro Velázquez, El conejo zacatuche: tan lejos de Dios y tan cerca de la Ciudad de México, para enmarcar la situación de esta especie.
Hasta octubre de 2018, según un monitoreo realizado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, había cinco poblaciones estables de teporingo: en el Parque Nacional Izta-Popo, en el Corredor Biológico Chichinautzin, en Milpa Alta, en Topilejo y en el Tepozteco.
Éste se encuentra en la lista de la Norma Oficial Mexicana en la categoría de peligro de extinción y asimismo, la Unión Mundial para la Naturaleza lo ubica en peligro y a partir de 2010 el gobierno federal propuso crear una unidad de manejo para su conservación.
“Es una especie que ha sido estudiada porque es muy atractiva (...) La mejor forma de conservarlo es saber de qué tamaño es el problema y resolverlo con la mejor información científica, ése es el propósito de instituciones como la UNAM”, sostuvo al respecto el ex rector de la institución, José Sarukhán.
El ahora investigador emérito del Instituto de Ecología, sostuvo que la forma en que esto se puede manejar y entender es con buena información, “con datos de investigaciones serias, de buena calidad, y que den resultados creíbles y objetivos”, señaló.
En septiembre , un artículo de la Universidad Autónoma del Estado de México aseguraba que el conejo teporingo estaba extinto en el Nevado de Toluca, el texto basado en un estudio realizado por el Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas de la institución así lo afirmaba; sin embargo, según la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la presencia del teporingo en el Nevado de Toluca nunca fue confirmada, por lo que no se podía declarar extinto en esa región. También señaló que se necesitan más de 50 años de ausencia de una especie en determinada región para poder declararla desaparecida.
De acuerdo con la dependencia, el último registro de la presencia del también llamado zacatuche en el Área de Protección de Flora y Fauna del Nevado de Toluca, data de 1975 pero en un estudio publicado en 1987, el investigador Jurgen Hoth, señaló que no se encontraron rastros de esta especie en la zona.
Ejemplar popular en el mundo
Se han llevado a cabo intentos de reproducción en cautiverio para una posible reintroducción en el Zoológico de Chapultepec y San Cayetano, en México; el Zoológico de Jersey, Inglaterra; el Zoológico de Amberes, en Bélgica; y la Universidad de Hokkaido, Japón.