La actividad que actualmente registra el Sol es normal, ya que se trata de una etapa de su ciclo de once años y no es una condición por la que hay que preocuparse, ya que esto no es un indicador ni tiene relación con algún otro fenómeno natural.
Américo González Esparza, investigador del Instituto de Geofísica (IGf) de la Universidad Nacional Autónoma de México y jefe del Servicio de Clima Espacial de México, informó que es completamente falso que la baja actividad solar pudiera causar clima helado, terremotos o erupciones volcánicas.
En estos momentos el Sol está muy tranquilo, en su mínimo de actividad, prácticamente dormido y no presenta manchas en su superficie pero, aclaró, esta disminución temporal tampoco contribuirá a aminorar el calentamiento global.
“Las variaciones en la radiación del Sol durante este ciclo son muy pequeñas comparadas con el cambio climático y aquel fenómeno no modificará la tendencia en el planeta”, precisó el también responsable del Laboratorio Nacional de Clima Espacial (LANCE).
González Esparza indicó que nuestra estrella tiene ciclos de aproximadamente once años y desde hace varios meses entramos en una fase de mínima actividad, ya que el Sol no tiene manchas en su superficie y es la etapa que indica el nacimiento del siguiente ciclo, el número 25.
¿Qué se estudia de los ciclos del Sol?
El doctor en física espacial señaló que en algunos trabajos se ha tratado de predecir cómo serán los siguientes ciclos solares porque, aunque se repiten en el lapso mencionado, no siempre son iguales. “La predicción del siguiente ciclo es muy importante en términos de clima espacial, por eso el tema es de interés para nosotros”.
Ha habido periodos en donde por varios ciclos el Sol ha presentado baja actividad (pocas manchas y tormentas), y en otros ha sido más intensa. El que recién está terminando, el ciclo 24, fue moderado y podemos decir que en su pico (en 2014) no tuvo pocas ni muchas manchas.
El próximo máximo de la actividad solar ocurrirá en cuatro o cinco años (2024 o 2025), y los expertos consideran que será parecido al de 2014 en cuanto a intensidad y número de tormentas solares.
González Esparza indicó que los científicos buscan saber cómo varía el ciclo del Sol, y para llegar a eso es necesario entender cómo cambia su campo magnético, conocimiento sobre el cual aún existen muchas dudas.
¿Cómo afecta la actividad solar?
Como parte de la evolución normal del Sol, en un par de años despertará y comenzarán los “fuegos pirotécnicos” y las tormentas solares.
“Los eventos del clima espacial están asociados a eyecciones de masa coronal (nube de partículas que salen de la atmósfera solar), a fulguraciones (intensos estallidos de luz) y a eventos de partículas energizadas por estas explosiones”.
Estos sucesos pueden provocar apagones, fallas en las órbitas de los satélites, interferencias en las tele y radiocomunicaciones, afectaciones a los sistemas de posicionamiento global o pérdida de información en computadoras y sistemas de almacenamiento, ejemplificó.
bgpa