Johnson & Johnson, desarrollador de la vacuna contra el covid-19 de conocida como Janssen, espera comunicar los resultados del muy esperado ensayo clínico la próxima semana, adelantó este martes el director financiero de la farmacéutica estadunidense en la cadena CNBC.
Se espera que la compañía solicite la autorización de emergencia para su inmunizante de una dosis al mismo tiempo, pudiendo convertirse poco después en la tercera vacuna en ser autorizada por las autoridades en Estados Unidos.
"Planeamos informar a principios de la semana sobre nuestros resultados", dijo Joseph Wolk.
Añadió que el estudio en fase 3 realizado con 45 mil personas en 80 países incluía potencialmente casos de las nuevas cepas identificadas en Brasil y Sudáfrica.
"En términos de suministro, estamos muy confiados y en camino para cumplir todos nuestros compromisos", añadió.
Estos incluyen la producción de 100 millones de dosis para Estados Unidos antes de final de junio, unas 200 millones de dosis antes del fin del año para la Unión Europea, con envíos que deben comenzar en abril. Otros 200 millones de dosis serán destinadas para países en desarrollo, que empezarían a mandarse en la segunda mitad del año.
La aprobación de una nueva vacuna llegaría en momentos en que Estados Unidos busca acelerar su tasa de inmunización, ya que el nuevo objetivo del flamante presidente, Joe Biden, es alcanzar los 1.5 millones inyecciones por día.
Biden anunció el lunes su nueva meta, que supera la anterior con la que se pretendía alcanzar las 100 millones de inyecciones en los primeros 100 días de su administración.
Como las vacunas de los laboratorios estadunidenses Pfizer y Moderna, la de Johnson & Johnson envía instrucciones genéticas a las células humanas para crear una proteína específica contra el SARS-CoV-2, con el objetivo de entrenar al sistema inmunitario para el virus vivo.
Pfizer y Moderna usan moléculas de ARN monocatenario, mientras que la vacuna de Janssen despliega un ADN de doble cadena que se convierte en ARN dentro de las células humanas para alcanzar el mismo objetivo.
El ADN lleva a cuestas una versión modificada y no replicada de un resfriado común que causa adenovirus. Este virus actúa como vehículo para entregar carga genética en el núcleo de células humanas. Las vacunas de AstraZeneca, Sputnik y CanSino usan una técnica similar, conocida como "vacunas de vector adenoviral".
Son más resistentes que los punteros inmunizates de ARN y pueden ser almacenadas en temperaturas de refrigeradores, por lo que no precisan congeladores especiales.
dmr