En México, la vacuna contra la viruela dejó de aplicarse en la década de los años 70, con ello, las personas menores a 50 años no cuentan con ningún tipo de protección y son vulnerables al virus que produce la llamada enfermedad del mono.
Rocío Baños Lara, investigadora en virología de la Facultad de Medicina de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), destacó que, aunque toda la población es vulnerable al virus, aquellos que recibieron la vacuna hace cinco décadas, cuentan con cierta protección.
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“Ahorita, los reportes que se han hecho han sido en personas adultas. No terminamos de entender que hace diferente a este tipo de virus con los anteriores. Todos estamos en riesgo de contagiarnos, sobre todo porque la vacuna contra viruela se dejó de aplicar alrededor del año 70, 72 y, obviamente, la gente que nacimos después no tenemos con esa protección cruzada que podríamos obtener con la vacuna de viruela”, explicó.
Señaló que la vacuna para frenar la viruela en humanos dejó de administrarse hace cinco décadas, cuando la misma Organización Mundial de la Salud (OMS) dio por erradicado el virus contagiante, tras finalizar una intensa campaña de vacunación.
Ahora, la vacuna contra la viruela del mono solamente podría recibirlo el personal de laboratorio, miembros del personal de la salud o a personas en riesgo, para protegerlos en caso de exposición a ortopoxvirus en los hospitales o su lugar de trabajo, como lo indicó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La investigadora de la Upaep destacó que la vacuna contra la viruela del mono se basa en una cepa del virus vaccinia, conocido genéricamente como cepa nórdica bávara de Ankara modificada de vaccinia, o MVA-BN, y ya fue aprobada para la prevención de la viruela del mono en Canadá, los Estados Unidos de América y la Unión Europea.
Los casos de viruela del mono en humanos son raras, especialmente fuera de África Central y Occidental, donde el virus es endémico en animales y circula principalmente en áreas densamente boscosas.
Señaló que la viruela del mono es muy diferente al virus Sars-Cov-2 que causa la enfermedad de la covid-19 y que circula a través de pequeñas gotas en el aire, ya que la transmisión realmente está ocurriendo por contacto físico cercano, contacto de piel a piel.
El virus de la viruela del mono se propaga a través de los fluidos corporales de una persona infectada, ya sea saliva o pus, que pueden albergar el virus. Las sábanas o la ropa contaminada con dicho fluido cargado de virus también pueden ser una fuente potencial de infección.
Fue el pasado 28 de mayo cuando el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud en México, Hugo López-Gatell confirmó que se registró el primer caso positivo de viruela del mono en el país, el cual fue importado. Se trata de un hombre de 50 años que al parecer se contagió en Holanda, pero reside en Nueva York, Estados Unidos.
Los periodos de contagio incluyen: incubación que oscila entre cinco y 21 días; invasión que tiene una duración de cinco días y se caracteriza por fiebre, dolor de cabeza intenso, inflamación de ganglios linfáticos, dolor de espalda, musculares y falta de energía; y las lesiones cutáneas que aparecen entre uno y tres días posterior a la fiebre. La erupción evoluciona hasta lesiones llenas de líquido que pueden llegar a un color amarillento. Las lesiones se localizan con mayor frecuencia en la cara y en palmas de las manos y plantas de los pies.
AFM