El maquinista involucrado en el choque de tren que dejó a seis personas sin vida en Irapuato descendió de la locomotora en la que permaneció encerrado durante casi 40 horas.
Su salida se dio a las 8:40 de la mañana del viernes 8 de agosto, luego de que sus compañeros, acompañados por asesores legales y personal especializado en psicología de Ferromex, lo persuadieran para continuar con el proceso correspondiente.

“No tenga miedo amigo, ya bájese, aquí lo van a respaldar. Hay abogados y todo para respaldarlo”, se escuchó decir a uno de sus compañeros.
Durante todo el tiempo que el operador estuvo dentro de la unidad, elementos de la Policía Municipal montaron guardia en el cruce ferroviario de la colonia Colinas del Río.
En un primer momento, el maquinista se negó a salir pese a la intervención directa de tres representantes de Ferromex. Sin embargo, sus compañeros le llamaron por teléfono, con lo que finalmente lograron convencerlo. Primero bajó sus maletas y después descendió él mismo, y fue abrazado por sus compañeros.
Tras el accidente ocurrido el miércoles, alrededor del mediodía, en el que un vagón se separó del resto del convoy en las vías de Paseo de Irapuato e impactó a varios vehículos en los que murieron seis personas, el operador decidió atrincherarse.
Agentes de la Fiscalía General del Estado lo escoltaron sin esposas hasta una camioneta que lo trasladó al Ministerio Público para rendir declaración.
Mientras tanto, continúan los análisis de la “caja negra” de la locomotora y el operador seguirá recibiendo asesoría jurídica y psicológica de parte de Ferromex.