Cuatro integrantes de la familia del ex alcalde de San Pedro Garza García vendieron y donaron los derechos de propiedad y posesión que les correspondían sobre el fósil de dinosaurio Einstein, con un valor de 12 millones de dólares, a Mauricio Fernández Garza.
Sin embargo, faltó una de sus hermanas de cederle la sexta parte o el 16.6 por ciento (dos millones de dólares), de los derechos que le corresponden sobre la pieza, para que se pueda concretar la donación del animal prehistórico al municipio de San Pedro.
Por lo pronto, el ejemplar, uno de los 10 más grandes y completos del mundo, solo podrá ser exhibido como préstamo y no donación, pues el ex alcalde, antes de fallecer, se convirtió en el propietario del 84.4 y no del 100 por ciento de la pieza.
De hecho el municipio deberá hacer una mención y reconocimiento público a su hermano Álvaro Fernández, respecto de su donación gratuita del 16.66 por ciento de los derechos de propiedad.
Este homenaje a su hermano deberá ser realizado mediante una placa con su nombre completo dentro del museo del Gran Parque cuando esté construido para su exhibición.
La información fue confirmada por la plataforma MILENIO-Multimedios por diversas fuentes y la consulta del acta número 20 de la sesión extraordinaria del pasado 26 de agosto.
Precisamente ese día, los regidores y síndicos aprobaron por mayoría la celebración del contrato de comodato o préstamo por 30 años del fósil original de dinosaurio, correspondiente a la especie apatosaurus excelsius y/o brontosaurus, actualmente en exposición en Parque Fundidora.
La pieza deberá ser exhibida en aproximadamente un año cuando esté construido el museo del Gran Parque, que estará ubicado sobre la avenida Díaz Ordaz, en la colonia La Leona de este municipio.
“La realidad es que si se acaban de arreglar las cosas familiares, lo voy a donar de por vida, ese es un poco el tema. Pues ahorita no puedo donar, porque hay otro socio, que no está de acuerdo. A dos de mis hermanos les pagué, en un precio que he estimado, que digo, no era ni uno ni 12 (millones), pero era un precio importante; luego otro hermano mío, el menor Álvaro, (para) él es un proyecto que mamá siempre tuvo mucha ilusión de que ese dinosaurio estuviera en México y su parte me la donó, o sea no me cobró por su sexta parte”.
“Entonces yo tengo la mía, a dos de mis hermanos que les compré, un hermano mío que me donó y una hermana mía, pues que hasta ahorita no ha querido vender, no. Por lo pronto, yo como dueño de las cinco sextas partes, yo sí puedo hacer un préstamo, nadie me lo impide, no puedo donarlo porque no soy dueño del 100”, dijo el entonces alcalde sampetrino en esa ocasión.
Einstein es uno de los 10 fósiles más grandes del mundo, de 24 metros de largo, cinco toneladas de peso, que era exhibido en el aeropuerto de Dubai, y ahora en el Museo del Papalote en Fundidora.
“La idea es que se pueda venir a San Pedro, la parte mía, soy el dueño del 84 por ciento, pero sí se puede prestar, es una propuesta al Cabildo para compartir una vez en la vida; esta pieza es una locura de mi madre, se le ocurrió traerla hace 20 años a México y acabó en el Papalote pero en la realidad no hay otro apatosaurus en el mundo”.
“Lo pusimos en venta: estuvieron las casas de (subastas de) Sotheby’s y Christie’s y las que se pueden imaginar, se estuvo trabajando en Einstein, lo mínimo que nos daban eran 10 a 12 millones de dólares, es lo que nos ofrecían y de ahí para arriba nos compartiremos las utilidades; la realidad es que no tuvimos ningún aventurado que quisiera formalizarlo”, mencionó en esa ocasión el entonces alcalde Mauricio Fernández Garza, según el acta.
mrg