Décadas atrás, diversas compañías en el mundo comenzaron a desarrollar dispositivos que buscaron sustituir a los cigarros convencionales tales como los cigarros electrónicos, vapeadores, plumas de vapor y calentadores de tabaco. De acuerdo con la página web de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), entre sus conclusiones sobre estos dispositivos señala que éstos “tienen el potencial de beneficiar a las personas adultas que fuman si se usan como sustituto completo de los cigarrillos regulares y de otros productos de tabaco para fumar”.
La tecnología ha evolucionado y la industria tabacalera ha desarrollado otras alternativas al cigarro lanzando al mercado internacional calentadores de tabaco -autorizados por la FDA como productos de tabaco de riesgo modificado- que están transformando a la industria al eliminar la combustión.
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Aunque aún se sigue investigando el impacto de los mismos en la salud de las personas, al respecto, la encuestadora internacional POVADDO afirma que, sin alternativas al cigarro, 9 de cada 10 fumadores no podrían abandonar ese hábito.
En México, si bien los calentadores de tabaco están permitidos, los vapeadores y cigarros electrónicos aún no han sido regulados. Actualmente, en el congreso hay más de 20 iniciativas que van desde prohibir hasta regular estos productos.
De acuerdo con la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, país que tiene una de las regulaciones más estrictas para los cigarrillos electrónicos, existe un consenso creciente en torno a la evidencia: “Si bien no está exento de riesgos, en comparación con fumar, los cigarrillos electrónicos son mucho menos dañinos”, indica.
De acuerdo con el blog oficial de dicha agencia sanitaria, el anterior punto de vista está respaldado por varios organismos clave, incluidos Cancer Research UK, Action on Smoking and Health, el Royal College of Physicians, la Asociación Médica Británica y un importante organismo científico de Estados Unidos.
Afirma, además, que la proporción de usuarios de alternativas al cigarro ha aumentado en los últimos años: “De los 3.2 millones de usuarios adultos de cigarrillos electrónicos en el Reino Unido, más de la mitad han dejado de fumar por completo. Otros 770 mil han dejado de fumar y vapear. Al mismo tiempo, las tasas de éxito para dejar de fumar han mejorado y estamos viendo una caída acelerada en las tasas de tabaquismo en Inglaterra”, señala en un catálogo de mitos sobre estos dispositivos.
La mejor opción para cualquier fumador es dejar el tabaco y la nicotina por completo, pero aquellos adultos que no opten por dejar de fumar merecen acceso a mejores alternativas e información precisa sobre ellos. Representantes de la industria han lanzado sitios de consulta sobre estas alternativas como la página web www.futurosinhumo.com.mx
RRR