Como parte de las acciones implementadas por Cemex en sus metas de sostenibilidad, creó Isocycle: un aditivo que, al mezclarse con el concreto fresco, le otorga una segunda vida al material, para luego ser transformado en partículas similares a la arena, grava o piedra triturada.
Así, cuando Isocycle entra en contacto con el agua, forma una especie de gel que se encarga de aglomerar el concreto, convirtiéndolo en agregado reciclado. Su implementación es muy sencilla y no requiere de inversión para su funcionamiento.
Gracias a esta estrategia se puede sustituir una parte importante del agregado total, sin afectar la calidad del concreto; de esta manera se evita que los escombros de las obras terminen en rellenos sanitarios, por lo que favorece la reducción emisiones de dióxido de carbono (CO2).
Y es que, la reducción de emisiones de CO2 es clave en el pilar de Productos y Soluciones Sostenibles de Futuro en Acción, el programa de Cemex para lograr la excelencia en sostenibilidad, a través de la acción climática, de la circularidad y la preservación de los recursos naturales, con el propósito de convertirse en una compañía cero emisiones.
Actualmente Isocycle –disponible en el portafolio de la familia de Cemex Aditivos– es aplicado en la refinería Dos Bocas, en Tabasco; el Boulevard Colosio y la Planta Tulum, en Quintana Roo.
La meta de la compañía de materiales de construcción es extender la implementación del aditivo en los procesos de todas sus plantas a nivel nacional de forma permanente.
RRR