Durante la más reciente edición de San Francisco World Spirits Competition (SFWSC), el certamen más grande y antiguo de su tipo de los Estados Unidos, se entregó la Medalla de Oro al licor de coco Kalani, elaborado en Mérida por Casa D’Ariti a través de prácticas sustentables.
Este concurso, organizado por Tasting Alliance, es considerado también el más influyente de bebidas espirituosas, por lo que obtener una medalla de la organización no solo ayuda a las marcas a ingresar y destacarse en los mercados internacionales, sino que es un paso fundamental que reconoce la calidad en su elaboración lo que les da certeza a los consumidores.
Los ganadores de medallas de SFWSC van desde algunos de los destiladores internacionales más renombrados hasta los pequeños productores, lo que impulsa su conocimiento a nivel global.
De acuerdo con los organizadores las medallas que otorga la San Francisco World Spirits Competition no solo es un testimonio de su arduo trabajo, sino que es un indicador universalmente reconocido de calidad y artesanía excepcionales.
Fundado en 2000 por Anthony Dias Blue, ganador del premio James Beard, los jueces del SFWSC lo integran reconocidos expertos, que incluye cantineros, mixólogos, dueños de bares, educadores e incluso algunos periodistas especializados; de ahí la relevancia del galardón para captar la atención de los medios especializados, los expertos de la industria y los consumidores.
Natural, sustentable y cercano a comunidades
Kalani es un licor de coco elaborado por Casa D’Aristi, en una hacienda mexicana que se ubica al sur de la ciudad de Mérida. Es libres de aditivos y saborizantes artificiales; su proceso se enfoca en la calidad y los sabores originales, además de una relación cercana con las comunidades.
Kalani está hecho de pulpa de coco cien por ciento natural, extraída de una palma única en la región, que fue llevado a Yucatán por Rafael Aristi, fundador de la destilería. Se cosecha en su propia plantación en el pueblo de Tizimín, luego es pelado y procesado a mano con el fin de asegurar su calidad y las técnicas tradicionales. Se extrae la carne y leche de coco, se cuecen a bajas temperaturas para desarrollar su particular sabor a coco tostado intenso, suave al paladar con notas de chocolate oscuro y caramelo, con un final fresco y elegante.
GCM