Durante el mes de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación, el cual busca promover acciones que favorezcan a las personas que padecen hambre.
Este día es un llamado a nuestra sensibilización y conciencia sobre los derechos de todas las personas a una alimentación correcta, así como la promoción de acciones con el fin de adoptar hábitos sustentables que ayuden a esta noble tarea.
Para ello, podemos empezar por evitar el desperdicio de la comida y aprovechar lo que nos sobra. La nutrióloga certificada Alina García recomienda “adelantarse un paso y planear los menús de acuerdo al número de personas que comerán en casa, organizar el refrigerador y mantenerlo limpio, así como tapar los alimentos para evitar su descomposición”.
La experta comparte algunos tips al respecto:
Al cocer verduras, usar una parte en la sopa, y otra para complementar el plato fuerte.
Al cocinar frijoles, utilizarlos toda la semana en diferentes platillos, como molletes, tostadas, enfrijoladas, o con arroz.
Aprovechar la carne molida para hacer dos platillos: albóndigas y picadillo.
Si sobra algún platillo, congelarlo y usarlo en otra comida más adelante.
Los productos que están próximos a caducar en nuestra alacena, podríamos regalarlos a quienes más los necesiten.
Otra sencilla forma de evitar el desperdicio de los alimentos, comenta la Nutrióloga, “es hacer una lista previa a las compras y evitar ir con hambre a realizarlas, así impediremos comprar compulsivamente alimentos de más o grandes cantidades”.
Un poco de orden en la alacena y el refrigerador puede ayudar a no acabar tirando los alimentos, poniendo los productos más viejos hasta adelante y los nuevos al fondo. Por otro lado, una vez abiertos, usar recipientes herméticos para mantener los alimentos frescos en el refrigerador y “asegurarse de que los paquetes estén cerrados para evitar que entren los insectos o microorganismos que los descompongan. Revisar que la temperatura del refrigerador esté debajo de 4ºC”, sugiere Alina García.
Alimentación consciente
“Una alimentación sustentable debe fomentar la reducción de desperdicios y el aprovechamiento de todos los ingredientes de un platillo. Respetar el medio ambiente, ser ética y saludable”.
Para la nutrióloga “una dieta correcta debe ser adecuada, variada, suficiente, inocua, equilibrada y completa”. Eso quiere decir “consumir los alimentos que el cuerpo requiere para lograr una nutrición correcta, con porciones adecuadas y así no comer ni de más ni de menos, evitando desperdiciar alimentos”.
TipsAhorros
Un poco de orden en la alacena y el refrigerador puede ayudar a no acabar tirando los alimentos, poniendo los productos más viejos hasta adelante y los nuevos al fondo.
Aunado a la dieta correcta, es importante “llevar un estilo de vida saludable, que las personas sean conscientes de la importancia de su cuerpo, de su salud, así como del entorno”, asegura Alina García.
Preparado principalmente con trigo, un grano que pertenece al grupo de los cereales, el pan es un alimento básico, por lo que se encuentra en todas las guías de alimentación a nivel mundial y que puede ayudarnos a llevar un estilo de vida saludable en nuestra alimentación.
“Es un producto versátil y adaptable a la dieta correcta”, comparte la experta.
Históricamente el pan ha sido parte de la alimentación humana, representa una alternativa equilibrada, pues aporta, entre otros elementos, vitaminas, antioxidantes y minerales (calcio, hierro, fósforo, potasio) nutrimentos fundamentales para el buen funcionamiento del organismo. Por su versatilidad puede disfrutarse solo “o en combinación con otros alimentos y completar una alimentación equilibrada”, concluye la Nutrióloga.
Este 16 de octubre, y todos los días del año, celebremos el Día Mundial de la Alimentación cuidando lo que comemos y practicando un consumo sustentable.
REPL