La zona piloto de libre comercio de Shanghái es una gran innovación institucional que ha desempeñado un importante papel en el comercio y desarrollo mundiales durante la última década, declaró el ministro de Fomento, Industria y Comercio de Nicaragua, Jesús Bermúdez.
En entrevista reciente con Xinhua, Bermúdez resaltó que "un mayor grado de competitividad en el comercio mundial es la clave del éxito", y eso es justo lo que la zona de libre comercio de Shanghái, la primera de su tipo en China, ha ofrecido desde su apertura en 2013.
Dicha zona es un proyecto pionero que estableció un grado de apertura sin precedentes en relación con la inversión extranjera y el comercio internacional, tanto de bienes como de servicios, señaló Bermúdez.
"Es de suma importancia para el comercio exterior, pues sirve como mecanismo para simplificar el comercio en general y crea un ecosistema empresarial más eficiente y competitivo", afirmó.
Las zonas piloto de libre comercio han acelerado el proceso de transformación y modernización económica de China, algo que Nicaragua entiende bien y ha implementado desde hace años, tomando en cuenta sus propias características y necesidades de desarrollo, agregó.
"Es algo que compartimos con China. Nosotros también tenemos zonas francas que están orientadas a un modelo de desarrollo basado en el aumento de las exportaciones y la atracción de inversiones", dijo el ministro nicaragüense.
Según un informe oficial divulgado en un foro conmemorativo del décimo aniversario de la zona piloto de libre comercio de Shanghái, esta había atraído 84 mil empresas de nueva creación hasta finales de 2022.
Beneficiaria del desarrollo de esta zona, la nueva área de Pudong había atraído 18 691 nuevos proyectos de inversión extranjera hasta 2022, con un capital acumulado registrado de 217 270 millones de dólares y una inversión extranjera acumulada real de 74 990 millones de dólares, según el informe oficial.
Tales cifras, observó Bermúdez, confirman que las zonas de libre comercio dan "mayor impulso" al comercio exterior y benefician a las empresas que se instalan en ellas.
Entre los beneficios, el ministro resaltó el aumento de la inversión extranjera directa, las crecientes oportunidades de negocios, la reducción de los costos logísticos y la simplificación de los trámites burocráticos.
Bermúdez también mencionó la reducción de aranceles e impuestos a la importación de materias primas, insumos, bienes intermedios y bienes de capital que las empresas utilizan para elaborar su producto final.
En el caso de Nicaragua, señaló Bermúdez, las zonas de libre comercio (o zonas francas) han desempeñado un papel importante en el desarrollo económico del país e influido en su posición en la región centroamericana desde el punto de vista económico y comercial.
"Las zonas han contribuido al crecimiento de la inversión extranjera directa y al crecimiento del empleo", indicó el ministro.
"Las empresas de zona franca en Nicaragua aportan cada año 48 % del total exportado por el país y generan alrededor de 133 mil empleos directos", añadió.
En los últimos cinco años, agregó Bermúdez, las exportaciones de las zonas francas han crecido a un ritmo anual de 8.7 %, lo cual ha ayudado a que Nicaragua obtenga acceso preferencial a los mercados externos mediante una red de acuerdos comerciales, así como a que diversifique sus inversiones en sectores como el textil y el agroindustrial.
"En nuestro país, las zonas francas han ayudado a promover una base industrial más sólida orientada a la exportación", aseveró Bermúdez.
Respecto de la zona piloto de libre comercio de Shanghái, Bermúdez considera que ha contribuido a reafirmar el papel de China como una gran economía proactiva en el plano internacional, junto a proyectos como la Iniciativa de la Franja y la Ruta, "una vía comercial que implica la cooperación económica de China con innumerables países, entre ellos Nicaragua."
"Las zonas francas aún son muy importantes, ya que generan potencial comercial y de inversión extranjera directa", declaró el ministro.
El acuerdo de libre comercio entre China y Nicaragua, firmado a finales de agosto, contempla amplios incentivos para la producción, exportación e inversión extranjeras directas, por lo que las zonas francas "aún desempeñarán un papel importante en el desarrollo de ambos países", concluyó.
RRR