El enólogo Alonso Granados estudió en España; se fue sin decirle a su papá, dueño de tierras vitivinícolas. Claro que era un acto de rebeldía, pero el vino lo llevaba ya en las venas y tenía que seguir su pasión. Así nació Decantos, vinícola en el Valle de Guadalupe, en Baja California, que tiene una característica única: la “decantación”, lo que ellos llaman: “La Gravedad del Vino”.
Y es que, Alonso Granados y su hermano Alejandro eliminaron las bombas mecánicas en la elaboración de vino. En el área de producción, habitualmente se aprecia el mecanismo de elaboración por decantación o gravedad que refleja el trabajo cotidiano (sin presencia de bombas mecánicas) y la filosofía de Decantos Vinícola para la elaboración de sus vinos monovarietales: desde el inicio hasta la etapa de embotellado final.
En entrevista exclusiva con MILENIO, Alonso Granados habla de la nueva línea de vinos de Decantos que se llama “Roble”.
“Cada año se nos van ocurriendo nuevas cosas y ahora no es la excepción. Traemos una nueva línea que presentamos en nuestra fiesta de La Bota. Se llama “Roble” y consta de 13 vinos: seis blancos, monovarietales todos; seis tintos y un rosado. Hacer mención a un vino roble, es decir que ha pasado en barrica únicamente seis meses, este vino está inspirado en la denominación de origen en España que se llama Ribera del Duero y normalmente es un tempranillo, es decir, es una media crianza. Aquí, como es una región donde tenemos muchas variedades de uva, quise hacerlo, pero con todos los vinos”.
La vinícola, actualmente producen alrededor de 70 vinos como la línea “Clásicos del mundo”, “Coupage” o “El peor vino del mundo”, entre otros.
“Estamos creciendo pero internamente. Actualmente seguimos vendiendo toda nuestra producción en casa, pero sí es verdad que para salir diseñamos El peor vino del mundo, un blanco y un tinto y representa alrededor de entre 3% y 5% de nuestra producción, realmente, la mayoría se consume aquí".
Actualmente, Decantos, una vinícola espectacular con una cava subterránea y un jardín desde donde se contempla el valle, produce alrededor de 25 mil cajas, unas 300 mil botellas al año y recientemente renovaron su Bistro Decantos, con platillos para compartir a cargo del chef Andrés Carlos Bórquez, una cocina hecha con productos de la región.
“Pero esto varía dependiendo los caprichos de la naturaleza que puede cambiar todo. Y La Bota es una fiesta que está fuera del calendario de las Fiestas de la Vendimia para no interrumpir lo que ya se venía haciendo”, dijo el enólogo y socio fundador de Decantos Vinícola, que se formó en la Universidad de La Rioja, España y conoció esta tradición en las Fiestas de San Fermín de Pamplona.
De hecho, la cava subterránea de vinificación fue intervenida por las artistas plásticas locales: Gyna Romo, Silvia Chávez, Lizeth Guiza, Rebeca Martínez, María Dolores, Claudia Cota y Francisco Navarro en una exhibición que se llamó: La fiesta y el vino.
¿A dónde va Decantos?, se le cuestionó. "Como ha sido desde un inicio, quitarle los mitos al vino, hacer algo mucho más amigable, mucho más fácil de tomar y que la gente se sienta con las ganas, no solo de disfrutarlo, sino de conocer un poquito más de vino y romper con esos paradigmas que hay", explica el enólogo.
No obstante, recuerda que, antiguamente, "el vino era para los reyes y los plebeyos no tenían forma de acceder a él; con el paso del tiempo se rompió con esta exclusividad. Y esta región nos da esa oportunidad de hacerlo de una forma muy dinámica: tenemos muchas variedades de uva y seguimos experimentando, haciendo todo tipo de vinos como espumoso, maceración carbónica, vino naranja... y en Decantos puedes probar un poquito de todo lo que hay en el mundo", asegura.