El 20% de los mexicanos declara haber sufrido discriminación en 2017 por su aspecto físico, orientación sexual, género, religión o clase social, según reveló hoy una encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), que señala uno de los principales retos del país.
Es la primera vez que el Inegi levanta una encuesta de este alacance y permite detectar cuál es la magnitud de la discriminación y contribuir al diseño de políticas destinadas a fomentar una sociedad igualitaria.
El colectivo que más discriminaciones dice haber recibido es el de las trabajadores del hogar, puesto que 39.5% sufrieron alguna negación de derechos, seguido de las personas discapacitadas (31.2%), los homosexuales (29.8%), los indígenas (29.5%), los afrodescendientes (26.9%), las mujeres en general (26.2%) y las personas con religiones distintas a la católica (24.2%).
Los actos discriminatorios denunciados se traducen en negaciones de derechos como el acceso a la educación, atención médica, trabajo, programas sociales, créditos y acceso a locales y negocios.
El acto que más denuncian los grupos de estudio lo constituyen los insultos o las burlas en la calle, como el caso de 19.3% de los discapacitados que declararon haber sentido que les miraban de forma incómoda. Asimismo, los indígenas dijeron haber sido discriminados en los servicios médicos y en el transporte público, mientras las mujeres declararon haber sido discriminadas en la calle.
La Ciudad de México fue la entidad donde los hombres (20.6%) declararon haber sufrido menor discriminación en comparación con las mujeres (26. %). En cambio, en el sureño estado de Guerrero, los datos se invierten: 23.5% de las mujeres dijeron haber sido discriminadas, mientras que en el caso de los hombres fue el 26.8%.
"La discriminación es una distinción ilícita, una práctica que al negar el principio absoluto de la dignidad humana, vulnera los cimientos mismos del sistema democrático y la institucionalidad propia del mismo", declaró el ombudsman mexicano, Luis Raúl González.
Según datos de la encuesta, 71.9% de los mexicanos opinan que se respetan poco o nada los derechos de los transexuales, 65.6% lo piensan sobre los homosexuales, 64.4% sobre los indígenas y 62% sobre las personas trabajadoras del hogar.
Ello se traduce, por ejemplo, en que 40% de los mexicanos se opone al matrimonio entre personas del mismo sexo y 56.6 % rechaza la adopción por parte de parejas homosexuales.
El estudio también revela prejuicios extendidos entre la población contra colectivos concretos, como el hecho que 60% de los mexicanos consideran que "la mayoría de los jóvenes son irresponsables", o el 44.7% que considera que la diversidad religiosa fomenta "más conflictos sociales".
Tras analizar el informe, González concluyó que la discriminación no es siempre resultado de una mala aplicación de programas públicos, sino fruto de "reglas que marginan o privilegian a determinados grupos sociales".
El presidente de la CNDH pidió implícitamente a Andrés Manuel López Obrador, que asumirá la Presidencia de México el 1 de diciembre, que genere "mejores condiciones de vida para las personas" sin dar lugar a "prejuicios o estigmatizaciones que dividan a la sociedad".
"Los enemigos de México son la pobreza, la desigualdad, la ignorancia, la corrupción, la violencia, la inseguridad, la impunidad; cuestiones cuyo combate y prevención deben ser intereses y prioridades comunes", sentenció.
FM