Para Alondra de la Parra “ser líder es servir...”, y esa filosofía la aplica cada vez que está frente a la orquesta que dirige, precisó durante la Conferencia “Líderes en cada atril”, que ofreció como parte de los festejos de los 80 años del Tecnológico de Monterrey.
El campus Ciudad de México fue el punto de reunión entre la directora de orquesta y el alumnado, profesores, egresados y directivos del Tecnológico, donde se integró al ciclo de conferencias “Inspirar, transforma” que la institución presenta como parte de su festejo. Ahí, se acompañó de un cuarteto de cuerdas, para hacer una analogía gráfica de su labor como directora de orquesta y líder con la que tiene una empresa.
De entrada, expresó: “¿Qué hace un director de orquesta? Conoce la música, comunica e inspira”.
Pero también comentó que un director “no debe saber tocar todos los instrumentos, pero sí debe conocerlos e incluso estudiar la partitura de todos”; para saber cómo dirigir y si los ejecutantes que integran la orquesta están haciendo bien su trabajo.
Acción que destacó “es lo que debe pasar en todas las empresas para lograr el éxito”.
Además, enfatizó la importancia que tiene la confianza entre el líder y su equipo de trabajo, en este caso, ella como directora y los músicos de la orquesta.
“La confianza entre el líder y el grupo es vital en cualquier empresa, al igual que el respeto”, porque es la única forma de lograr el objetivo.
En su cotidianeidad explicó que, si bien en la orquesta ella es la líder, “cada sección tiene sus líderes” y ella tiene que respetarlos para que se logre el objetivo, pues “el director no es el principio, ni el fin, simplemente es el conducto” para que el grupo alcance el objetivo, por lo que incluso en algunas ocasiones “tengo que seguir al grupo”.
Para ejemplificar sus palabras en varias ocasiones se apoyó de los músicos que la acompañaron, demostrando que cuando no hay acuerdo, respeto y confianza, el sonido simplemente no es el que se desea; en cambio cuando hay sincronía y trabajo de equipo, el resultado es favorable.
Tras compartir su experiencia y la labor que desempeña al frente de su orquesta y que reiteró se puede aplicar fácilmente a cualquier empresa, Alondra respondió algunas preguntas del público que la escuchaba; y fue entonces cuando destacó la importancia de dar oportunidad de desarrollo a las personas sin importar el género; así como lo positivo de que existan orquestas infantiles.
“A la hora de seleccionar seamos justos porque las mujeres somos iguales de capaces”, precisó.
Y destacó que en su experiencia ella no hace diferencias; pues trabaja con músicos de todas las edades y culturas “y no ensayo al músico, ensayo la música que estoy produciendo, mi enfoque está en el resultado, así que dejemos de ver la envoltura”.
Da respuesta
Al hablar de la importancia de las orquestas infantiles fue muy precisa por el efecto que generan en los pequeños.
“Un niño en una orquesta es un niño que sabe trabajar en equipo, imaginar, abstraerse, entender la generosidad… por eso es importante crear orquestas infantiles para generar el desarrollo humano”.
Finalmente, Alondra recibió un reconocimiento de la institución, el cual se sumó a la ovación del público.
Claves
Sus frases
“La orquesta es un microcosmos de cualquier organización humana”, dijo Alondra.
“Un líder debe fomentar el trabajo en equipo y dar confianza para lograr el objetivo”, expresó