Amy Adams: “Ponerte en el lugar de quien piensa distinto a ti puede cambiar el mundo”

Nominada al Oscar en cinco ocasiones, la consolidada actriz protagoniza la esperada cinta 'Arrival: La llegada’, una historia de ciencia ficción humanista sobre la comunicación con extraterrestres 

(Sony Pictures)
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(Sony Pictures)
Miguel Cane
Ciudad de México /

Empezó a figurar hace más de 15 años en papeles pequeños en la televisión y luego se distinguió en la cinta Atrápame si puedes (2002), de Steven Spielberg. Desde entonces Amy Adams (Venecia, 1974) ha ido haciendo una filmografía impresionante que le ha ganado ser nominada al Oscar en cinco ocasiones: por su conmovedor trabajo en Junebug en 2005 y después por sus apariciones en La duda (2009), El peleador (2010), The Master (2013) y Escándalo americano (2014).

Ahora la crítica habla de la posibilidad de que el año próximo vuelva a nominársele, esta vez por su papel protagónico en Arrival: La llegada, el trabajo más reciente de Denis Villeneuve, filme celebrado en los festivales de Venecia y Toronto que llega a pantallas de México y Latinoamérica este fin de semana.

En esta cinta, la actriz interpreta a Louise Banks, experta lingüista reclutada por el gobierno estadounidense para descifrar el inexplicable lenguaje con el que se expresa una especie extraterrestre cuyas naves han aparecido en 12 puntos diferentes de la Tierra con intenciones desconocidas.

¿‘Arrival’ es solo una cinta de ciencia ficción, o hay algo más en ella para un público que no acostumbra este tipo de filmes?

No creo que sea una película de extraterrestres en sentido estricto o tradicional, Denis (Villeneuve) se mantuvo muy firme en eso, porque a pesar de las posibles implicaciones políticas, de las explicaciones científicas o lingüísticas que aparecen en la película, él nunca quiso perder de vista que se trataba de una historia de algún modo íntima, interior. Para mí, se trata de una historia íntima que relaciona a una madre con su hija. Creo que ese es el corazón de la historia de Ted Chiang, en la que se basa el guión. Para mí, así funciona la película.

También hay elementos políticos en esta historia de ciencia ficción.

Sí, creo que se plantea un cierto clima político y se discute también la cuestión del tiempo, cómo nos afecta, y el modo en que la toma de decisiones puede cambiar al mundo; la relación entre un país y otro. Esos son temas importantes y Denis quiso ponerlos sobre la mesa.

Claramente es una película sobre la comunicación como una ciencia, algo que resulta poco común.

Desde luego, la película plantea que la única manera que tenemos de comunicarnos es desarrollando las relaciones humanas; si no conoces a la gente, ni estableces contacto cuando hablas o no estás en un contexto donde una relación da origen a otra, hay muchas cosas que se pierden y se malentienden. Las lenguas son solo una parte de todo eso; la comunicación, en realidad, es entender al otro, tratar de ponerte en el lugar del otro, de quien piensa distinto a ti, es lo que puede cambiar al mundo. Y volviendo a lo anterior, a veces pienso en mi hija Aviana, de seis años. Ella ahora mismo solo ha adquirido una pequeña porción de la capacidad de lenguaje que yo tengo, pero muchas veces percibo de que puede comprender muchas cosas y no solo con palabras.

¿Cómo construiste el personaje de Louise Banks? ¿Hiciste mucha investigación previa?

Fue fascinante aprender de ella con el trabajo de investigación para hacer la película. Algo que aprendí, por ejemplo, fue que la lingüística no trata solo de hablar distintos idiomas, sino de la historia de las lenguas, y de la historia de las estructuras del lenguaje, que es algo muy complejo. Por suerte tuve una profesora-entrenadora que supo hacer enfocarme en determinadas cuestiones que yo necesitaba para encarnar a Louise: no solo cómo comunicarme, sino cómo establecer y entender la comunicación en diferentes niveles.

¿Cómo describirías la transición que vive el personaje a lo largo de la película?

Louise está todo el tiempo lidiando con la necesidad de acercamiento, de encontrarse con una emotividad íntima en su relación con los extraterrestres, ella está marcada por eso. Establece una interacción de la que puede depender el destino de la humanidad pero, al mismo tiempo, esa relación le abre un universo emocional desconocido, un viaje hacia sus sentimientos más profundos e intensos. Ambas cosas están intrínsecamente ligadas, y en ello reside el poder de esta historia. Por lo mismo, hay cosas hondas que no te puedes imaginar y con las cuales resulta difícil establecer una empatía ni siquiera desde el punto de vista de la actuación. Por eso a la hora de crear este personaje, Denis y yo trabajamos con esta carga de dolor inmensa de ella, pero que no debe encerrarla en sí misma, pues está obligada a una misión muy delicada. En ese sentido el personaje me demandó mucho más tiempo y esfuerzo que ningún otro que hubiera interpretado antes.

¿Esta es una cinta que se puede calificar de femenina?

No hay muchas películas que tengan personajes femeninos tan complejos en el centro de los acontecimientos. Es sorprendente cuando te encuentras un guión tan precioso y maravillosamente escrito y sí, esta es una historia de mujeres que viene de alguien tan potente y artístico como Denis, pero también le habla a muchos tipos de público.

¿Esa fue la razón por la que aceptaste el papel?

Mira, cuando un director me ofrece un papel en su película, lo primero que le pregunto después de haber leído el guión es por qué quiere que su personaje sea yo. Denis me dijo en nuestra primera entrevista: “necesito ver lo que Louise piensa y siente, y yo puedo ver lo que tus personajes piensan cuando actúas”.

Hay algo mucho más íntimo en esta cinta, que en otras del género. ¿A qué se debe?

A que es una historia muy humana, con la que podemos relacionarnos muchos: como te decía, soy mamá y eso es el centro de mi universo; así que en los primeros cinco minutos del filme y las primeras páginas del guión —donde se introduce la historia personal de Louise—, me conmovieron profundamente, pero también fue maravilloso cuando la historia se movía más hacia la ciencia ficción pero manteniendo el contacto con lo humano, porque en este tipo de cintas solemos asumir que los alienígenas buscan ser como nosotros y en este caso no es así.

¿Cómo es Denis Villeneuve en el set?

Cuando filmé Animales nocturnos, justo antes de esta película, ya había visto Sicario, y Jake Gyllenhaal, que actúa conmigo en Animales había trabajado con Denis en dos películas. Él me aconsejó que no perdiera la ocasión de trabajar con él. Resultó ser tal como me lo describió: es una persona muy sensata, centrada, alguien muy calmado. Puedes sentir esa serenidad en cierta forma en el filme. Denis tiene una forma de dirigir muy paciente, algo que no había experimentado antes. Es un director que además es un gran espectador, con una profundidad intelectual y puede ser muy divertido, ya que permite a todos en el elenco la libertad de intentar otras cosas, crea una sinergia colaboradora, pese a que al final es él quien está absolutamente al mando del barco. Pocos directores son así.

¿Es esta tu cinta favorita de entre todas en las que has participado?

No sé si puedo decir que tengo una favorita por encima de las demás. Todas, para mí, son especiales y muy significativas. Pero creo que esta es la película más estremecedora emocionalmente y visualmente distinta en la que he tenido el honor de participar.

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