“México es una potencia de compositores, hay que resguardarlo y hay que tocar más la música contemporánea mexicana”, asegura Ana Gabriela Fernández, pianista concertista que hará su debut como solista el 26 y 27 de noviembre con la Orquesta Filarmónica de la UNAM, en la Sala Nezahualcóyotl.
La artista cubana-mexicana no solo es intérprete, se describe como investigadora y como difusora de la música contemporánea mexicana. Muestra de ello es su próxima participación, en la que será dirigida por Ronald Zollman y en la que interpretará Fractalis, obra de la compositora mexicana Gabriela Ortiz.
“Es el tiempo de las mujeres creadoras”, dice en entrevista Ana Gabriela Fernández, quien inició sus estudios en la Escuela Nacional de Arte de la Habana.
Pero ¿qué significa que sea solista? La pianista responde: “Es un gran compromiso, es como tratar de decodificar los sonidos que el compositor escribe en la partitura; me siento muy privilegiada y con un gran compromiso porque es el estreno en México de un concierto para piano y orquesta de una de las grandes compositoras del siglo XX, mexicana, que es Gabriela Ortiz, una compositora que está siendo escuchada a nivel mundial, una compositora que está teniendo gran éxito”.
La pianista dice que ser solista conlleva un gran trabajo intelectual diario. “Este concierto me lo sé desde hace un año, es un concierto que ya es parte de mí, está en cada célula de mi cuerpo, y el tiempo ha pasado y ha pasado para bien porque creo que es fundamental que el tiempo pase por las obras. Es muy diferente cuando una como solista va a dar un recital solo y que toda la gama de colores o toda la estructura dependa solo de ti, que cuando uno es solista con una orquesta, porque toda orquesta tiene su sonido propio”.
Intérprete y compositor
Ana Gabriela Fernández, concentrada y tocando el piano mientras Gabriela Ortiz la observa, es parte de un video donde se puede ver a ambas pianistas; una imagen que fortalece el pensamiento de la primera sobre la importancia de la cercanía entre el intérprete y el compositor.
“Es muy bonito y diferente cuando trabajas una obra con un compositor vivo, que cuando vas a decodificar una obra de un compositor que no está y que no vivió en tu tiempo. Entonces la energía que se crea, para mí, es única y es especial”.
Sobre la obra de Gabriela Ortiz, la pianista comenta: “Es un concierto muy rítmico que depende mucho del pianista porque hay que tener mucho cuidado en los cambios rítmicos y con la responsabilidad de ir llevando la música, porque hay muchas partes que dependen enteramente de mí. Hay que recalcar que en la obra de Gabriela Ortiz hay mucho ritmo pero también coloratura y ambiente, que tiene que ver la influencia de los compositores franceses, por ejemplo, pero también de la influencia de su maestro Mario Lavista”.
Sobre esta participación, la pianista cree que desenvolverse en un escenario es parte fundamental de un solista. “Pararse en un escenario es una enseñanza en sí, y cada vez que uno lo hace pasan cosas diferentes, aunque vayas a tocar la misma obra. Yo creo que pararse en un escenario es parte fundamental de un solista”.
La pianista se presentará el sábado 26 de noviembre a las 20:00 horas, y el domingo 27 a las 12:00 horas en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario.
Historia musical
Ana Gabriela Fernández tenía cinco años cuando descubrió su pasión musical. “Mi mamá es musicóloga e investigadora y mi papá es ingeniero de sonido, entonces, en mi casa, además de ser investigadora mi mamá, pues era profesora de la historia de la música contemporánea”. La artista estudió piano en la Escuela Nacional de Arte de La Habana, después llegó a México e hizo una maestría y un doctorado en la Facultad de Música de la Universidad Nacional Autónoma de México, además de que ha ganado varios concursos nacionales e internacionales.
jk