Una mujer portuguesa que ha sabido unir las dos orillas, el castellano y el portugués “y que ha hecho de su poesía un lema: toda gran poesía es ética”, la poeta Ana Luísa Amaral, fue galardonada con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, cuyo objetivo es reconocer “el conjunto de la obra poética de un autor vivo que, por su valor literario, constituya una aportación relevante al patrimonio cultural común de Iberoamérica y España”.
“La obra poética de Amaral, toda su trayectoria literaria es un mensaje de apertura, de respeto y de tolerancia, de reivindicación en una clave anglosajona que ha sabido unir el valor de lo pequeño y de lo cotidiano. Recuerda la belleza, la intensidad de los pequeños momentos y lo hace siempre desde una experiencia ética, de compromiso con los derechos y las libertadas, sobre todo para que se oiga la voz de la mujer”, destacó María de los Llanos Castellanos, presidenta de Patrimonio Nacional de España, al dar a conocer el nombre de la ganadora de la edición 30 del Premio.
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Considerada por la crítica la poeta portuguesa más importante de nuestros días, y cuya obra ha sido comparada con la de Emily Dickinson y Wisława Szymborska, la poesía de Amaral se aleja de cualquier discurso épico o grandilocuente y transfigura “los pequeños actos cotidianos en momentos poéticos de gran voltaje, vitalidad y profundidad”.
Su más reciente poemario aparecido en español es What’s in a name?, publicado bajo el sello de Sexto Piso y con traducción de Paula Abramo, en el que lo mismo se encuentran poemas dedicados a la crisis de los refugiados en Europa, que versos con recetas de cocina atravesadas por crisis económicas, o poemas sobre la alegría y la resistencia escritos desde la ventanilla de un avión.
Dotado con un monto de 42 mil euros, el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana lo han obtenido Raúl Zurita, Joan Margarit, Ida Vitale, Nuno Júdice, Fina García Marruz, Juan Gelman, José Emilio Pacheco y Gonzalo Rojas, por mencionar sólo a algunos.
PCL