Cocolvú, cuya más reciente inspiración se aprecia en uno de los 10 murales con los que la cafetería Cielito Querido inició el festejo por su décimo aniversario, asegura que el “branding art no es una moda, muchos lo consideran así y dicen que puede terminar en algún momento, pero yo creo lo contrario”.
En entrevista con M2 destaca la importancia de que dicha sinergia se mantenga y, aún más, cada día se incremente.
“Para el artista es muy positiva esta mancuerna, porque el trabajo llega a mucha gente y cada vez es más importante el alcance que se tiene, es una promoción directa y gratuita, que en mi caso va más allá de la paga o incluso del interés que pueda generarse para otra oportunidad de trabajo”.
“Me refiero a la emoción que provocas en la gente, por eso para mí es muy gratificante que la gente me haga comentarios después de que ve mi obra; disfruto mucho que me diga que ver mi pintura o mi ilustración le provoque algún sentimiento”, agrega.
Actualmente ese beneficio para él se materializa en la comunión que hizo con la cafetería por el décimo aniversario de la marca: es uno de los 10 artistas que pintaron un mural (los cuales ya se encuentran en las diferentes sedes) inspirándose en algún ingrediente del menú de la marca.
“Tuve la fortuna de hacer arte genérico, traté de representar la esencia del café con una base de puros granos y de ahí emergen vasos, tazas y personajes. Mi trabajo es alegre, colorido y muy mexicano, siempre trato de plasmar algo que genere situaciones positivas y agradables”, explica el también diseñador gráfico, quien nos cuenta que en su infancia estuvo rodeado de pinceles, libros de arte y pinturas; y ahora proyecta su sensibilidad “en grandes murales, portadas de discos y etiquetas de cervezas o mezcales”.
Su finalidad es crear, proyectar su sensibilidad en cualquier plataforma y cualquier instante. “Es un estilo de vida, por eso para mí todos los días son viernes, porque disfruto levantarme, tomarme un café, estar en mi casa y trabajar ahí o, de repente, mancharme las manos de pintura y estar a 10 metros de altura creando un mural y al día siguiente estar en la comodidad de mi casa pintando con musiquita”.
Talento emergente
Como parte del festejo, Cielito Querido Café lanzó la plataforma Talento Caído del Cielo, un proyecto que celebra la calidez, tradiciones, sabores y colores, a través de los ojos de los artistas.
La primera acción es “un concurso para encontrar nuevos talentos, el ganador hará los diseños de los vasos para 2022”, dijo el artista.
Además de haber pintado uno de los murales, Cocolvú será jurado de la competencia, por lo que comentó: “Yo les diría a los chicos que crean en sí mismos, que tengan la convicción de que participar es importante y que si no son seleccionados no se desanimen, por el contrario, que se mantengan firmes en su decisión de dedicarse al arte, de vivir del arte, porque si se puede”.
Y concluyó parafraseando al publicista Santiago Pando: “‘Creer es crear’, así que crean en ustedes y participen”.
Las claves
Paredes artísticas
Los murales están en 10 de las sedes más icónicas de Cielito Querido: Masaryk, Montevideo, Génova, Plaza Juárez, Regina, Torre Map- fre, Centro Cultural Rule, Narvarte, Dakota y Miyana.
En internet
La plataforma Talento Caído del Cielo, creada por Cielito Querido y Mercarte, se estrena con la convocatoria para descubrir al talento emergente.
Más festejos
En julio y agosto, Talento Caído del Cielo se trasladará a las calles, y en septiembre, mes del aniversario, se realizarán dos colaboraciones especiales.
bgpa