En tiempos en que la tolerancia es un tema de discusión cotidiano, la representación del desnudo femenino todavía causa escozor, aunque se trata de la obra de uno de los grandes pintores de la historia.
Con gran éxito el Museo de Arte Kimbell de Fort Worth, Texas, inauguró en días pasados la muestra Renoir; el cuerpo, los sentidos, la cual ha recibido elogiosas coberturas por parte de los medios. Sin embargo, las buenas conciencias impiden que sus desnudos se publiquen en las redes sociales o aparezcan en la televisión estadunidense.
George Shackelford, subdirector del recinto, afirma en entrevista que la desnudez es impensable en cadenas de televisión como CBS o NBC.
“A mucha gente todavía le causa escozor la forma de pintar de Renoir, pero he visto personas que al asistir a la exposición y verla hasta el final, salen llorando y cambian su opinión sobre los logros del pintor”.
Shackelford refiere que el desnudo todavía afecta a ciertas personas. “En este mundo todavía hay gente que piensa a la antigua, incluso en las televisoras o en las redes sociales. Por ejemplo, no se nos permite utilizar figuras de desnudo para difundir la exhibición en internet. Y eso es una regla internacional, no exclusiva de Texas. En Facebook, Twitter o Instagram no puedes publicar un desnudo total”.
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Un tema recurrente
La muestra Renoir; el cuerpo, los sentidos, planteada como un homenaje al pintor que el de 3 diciembre cumplirá 150 años de fallecimiento, tuvo como punto de partida una serie de obras del Instituto de Arte Clark, ubicado en Massachusetts, poseedora de la mayor colección del artista en Estados Unidos y se complementa con piezas provenientes de los cuatro continentes.
Shackelford explica que la muestra se centra “en un estudio sobre Renoir como un pintor y escultor del cuerpo humano, fundamentalmente del desnudo femenino. La exposición examina a Renoir a través de este único tema desde el principio hasta el final de su carrera, con obras que va de un cuadro de principios de 1860 a uno que pintó el año de su muerte en 1919”.
Para ubicarlo en el contexto de la historia del arte, se incluyen obras de artistas que admiraba entre sus contemporáneos, así como de quienes influyeron en él, para seguir con autores posteriores a su muerte. Sus desnudos alternan con trabajos de autores que van del siglo XVII al XX, como Peter Paul Rubens, François Boucher, Camille Corot, Gustave Courbet, Edgar Degas, Paul Cézanne, Pablo Picasso y Henri Matisse.
¿Por qué es importante el desnudo en la obra Renoir?
A Renoir le gustaban artistas que se concentraban en la figura humana, como Degas, por supuesto. Le fascinaba el desnudo, que era un elemento clásico para que los estudiantes aprendieran a dibujar el cuerpo humano. El desnudo femenino fue un elemento recurrente en la obra de Renoir y se vuelve un tema dominante desde los años 80 del siglo XIX hasta el final de su vida. Queríamos reunir obras que nunca se habían visto juntas, por lo menos desde hace muchos años, para mostrar su fascinación por el cuerpo humano y los sentidos y dar una mejor imagen de cuál fue su papel en la historia del arte.
En la muestra se advierten los cambios en las diversas etapas en las que abordó el tema.
Una de sus primeras obras maestras en la muestra es un cuadro de 1870, que muestra a una mujer parada a la orilla de un río con un perro, donde vemos a un Renoir que se acerca a un estilo convencional, pero para 1876 pinta Estudio del torso de una mujer a la luz del sol, su estilo ha cambiado completamente, por la fascinación por forma en que el color actúa cuando está bajo una luz hermosa. Su arte comienza a cambiar, a evolucionar y a desarrollarse hasta que, al final de su carrera, pinta estas figuras monumentales e incluso realiza algunas esculturas de las mismas y se convertía en el arista que muchos críticos piensan que fue el artista más importante en los tiempos de la primera guerra mundial.
¿Cómo lo juzgó la crítica en su tiempo?
Fue admirado por muchos, como también fue criticado. Hay una cita famosa sobre su obra Torso, efecto de sol, en la que el crítico Albert Wolff escribió: “¿Podría alguien explicarle amablemente al señor Renoir que el torso de una mujer no es una masa descompuesta de luz con plastas de verde y púrpura que indican un estado de completa putrefacción?”. Pero en la misma exhibición hubo críticos que pensaban que era una hermosa obra de arte. Renoir es siempre una figura controversial: siempre que pintaba algo nuevo había quienes pensaban que era fantástico y otros que decían que era la forma incorrecta de hacerlo.
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