La figura de aquel director autócrata ya quedó atrás: Ethan Eager

En 2010 empezó como asistente en la Orquesta Sinfónica Juvenil (Osijut) y desde 2014 hasta la fecha como ayudante artístico.

Ethan Eager es un director de orquesta nacido en Torreón. (Martín Piña)
Jorge Maldonado Varela
Torreón, Coahuila. /

Ethan Eager es un director de orquesta nacido en Torreón, Coahuila, que creció con el sonido de la música, venía en su sangre. Tanto a Ethan, a sus de siete hermanos y a todos sus primos, la abuela se encargó de inculcarles el amor por la música, pero también por tocar un instrumento, una base sólida que lo llevaría a convertirse en director de orquesta.

Hace unos días fue presentado como asistente de dirección de la Camerata de Coahuila, una orquesta que ha sido referencia y mayor influencia, desde acudir continuamente a los conciertos con su familia allá por el 94, hasta tomar clases con algunos músicos de la orquesta cuando iniciaba sus estudios.

“El panorama musical que tuve de niño es diferente al de los niños o jóvenes de ahora. En mi infancia había discos de música clásica en la casa pero eran las mismas obras y la misma versión, ahora encuentras la obra que tú quieras, en múltiples versiones y al instante; es un lujo que de niños no tuvimos nosotros”.

Aun cuando estuvo rodeado de músicos y de aprender piano y luego violín, en su adolescencia Ethan no pensaba desarrollarse de manera profesional en la música, hasta que un buen día se organizó con sus hermanos y algunos amigos para conformar una pequeña orquesta juvenil, que se convertiría en el coro y orquesta “Ecos del Desierto”.

“Formamos una orquesta y llegó a tal tamaño que era necesario de que alguien dirigiera y yo tomé la batuta, ahí fue cuando dejé el violín y empecé como director artístico. Siempre me gustó dirigir, nunca lo vi como una profesión, no pensaba que de eso se pudiera vivir y no hay nada mejor que vivir de lo que amas”.

Considera que su función de un director no es sólo llevar el tiempo, sino que resulta fundamental estudiar y poner en práctica cada obra previo al concierto, “es ahí donde el director llega a transmitir, convencer y trabajar en equipo, pues la figura del director autócrata ya quedó atrás, ahora es parte del grupo y tiene su función”.

“Lo que me gusta es que el director crea música, es como un escultor o un pintor de música, con la diferencia que la pintura se queda, la música es un instante. El director tiene que hacer una escultura con la música con la partitura del compositor, además, no sólo se trabaja con la música sino con personas”, complementa.

Respecto a la batuta de un director, Ethan Eager comparte que no representa nada especial en su profesión, ni lo considera como un instrumento musical.

“El instrumento del director es toda la orquesta, no la batuta, la batuta es sólo una herramienta que puede o no usarse y que ayuda en agrupaciones grandes. Yo no le pongo un valor místico a la batuta”.

En 2010 empezó como director asistente en la Orquesta Sinfónica Juvenil (OSIJUT), y desde el 2014 hasta la fecha como director artístico. Participó en varias ocasiones como director invitado en conciertos didácticos con la Camerata de Coahuila y ahora es asistente del director Ramón Shade. Asimismo, también es director del Instituto de Música de Coahuila.

“La música es una disciplina que te servirá toda la vida sin importar la profesión que se tenga. Con una formación musical puedes llegar a ser mejor profesionista porque hay habilidades cognitivas y emocionales que se aprenden como músico, será alguien se sepa apreciar el arte".

¿Qué es lo más difícil de ser un director de orquesta en un concierto?

No te puedes equivocar. El trabajo difícil lo está haciendo el músico, con esas notas y obras tan complejas y con una técnica que les tomó años perfeccionar. El director no puede dar mal una entrada, no puede perderse porque los músicos lo ven como un apoyo que necesitan.

¿Como acercar a los niños y jóvenes a la música?

Todos los niños pueden aprender a apreciar la música, es como un idioma que se aprende, si nunca se les enseñó, no le entenderán y eso hará que no les guste. Aunque se llegue a pensar que la música clásica es para relajarse, es la cosa más tensa, estresante y apasionada que existe. Una de las formas de atraerlo a la música es exponerlos a sonidos de orquestas o llevarlos a escuchar los instrumentos para conocerlos.

Directores de orquesta referentes en Ethan Eager:

  • Mariss Jansons
  • Carlos Kleiber
  • Leonard Bernstein
  • Ramón Shade

EGO

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