Rajoy Wichimoba y sus pulseras y collares con chaquiras que ayudan a los espíritus

Gabino González, presentó sus artesanías dentro del encuentro artesanal que auspició la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro.

Artista Rajoy Wichimoba. (Especial)
Lilia Ovalle
Torreón, Coahuila /

Sentado frente a una mesa llena de cuentas de vidrios coloridos, el artista Rajoy Wichimoba, conocido en Torreón como Gabino González, presentó las pulseras, collares, aretes y anillos que confecciona a mano dentro del encuentro artesanal que auspició la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro.

Y aunque se trata de piezas económicas, algunas de ellas llevan consigo historias a través de la iconografía del desierto y de la comunidad tarahumara a la que pertenece, y en la cual hoy aún se piensa en los espíritus que acompañan a las mujeres y los hombres; espíritus que ante las demandas de la vida cotidiana suelen enfermar y es por ello que los chamanes deben hacer actos de reparación.

“La expo está muy bonita y hay muchas cosas que ver, están las artesanías de los huicholes, de los laguneros y de muchos lados. En la venta nos va más o menos pero ahorita de lo que se trata es más bien de sacar lo que se tiene para que la gente la conozca, vea las artesanías”.

Gabino comentó que para hacer una pulsera o un collar, el tiempo varía y si se cuenta con experiencia pueden ser quince o veinte minutos, pero otras piezas más elaboradas son de cuatro o hasta cinco horas. Para quien no tiene esa experiencia, lo más elemental puede ser mucho trabajo y por tal motivo dedicarle una mayor cantidad de tiempo.

“Si se es principiante se puede tardar como una hora en hacer lo que a otros no les cuesta. Si eres principiante puedes hacer cinco o seis piezas al día, pero si ya eres experto, entre quince, veinte o incluso treinta. Es arte rarámuri del estado de Chihuahua, de la sierra que se conoce como tehuerichi es por eso que cada figura que viene en el collar tiene su significado, por ejemplo la figura del venado, que representa abundancia y la comunidad la piensa para la lluvia.

El peyote es la famosa hikuri. Hay gente a la que el peyote le cura el alma, por ejemplo cuando se dice que las mujeres tienen cuatro espíritus y los hombres tres; uno de esos espíritus a veces se enferma y se muere, entonces para que reviva otra vez ese espíritu tiene que hacer una ceremonia. Esa ceremonia todavía se hace y depende de cuando esté enferma la persona y hay un chamán o una chamán que te guía cuando estás con desánimo o sin fuerzas”.

Tanto el venado como el peyote dan identidad a esta cultura milenaria, y este artista dijo que las mujeres tienen un espíritu superior, uno más que el hombre porque ella es dadora de vida. Los espíritus representan el presente y el futuro y es por ello que hay que mantenerlos sanos.

“Lo que tejemos con chaquiras tiene un valor simbólico, la gente puede comprar la pulsera o el collar pero los dibujos tienen un significado, aparte de que se adorna, aporta a la cultura mexicana porque los indígenas del norte también soy mexicano”.

aarp


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