Han salido las segundas emisiones de las Convocatorias de Espacios Escénicos y de Títeres y Objetos, una que promueve el Helénico y otra el CENART dentro de lo que se comprende como Proyecto Chapultepec, Naturaleza y Cultura; levantando una polémica que no entiendo ni sé del todo que “Dios detrás de Dios la trama empieza”, citando a Borges. La molestia de algunos colegas es por el concepto de “Premio” mediante el cual se piensa otorgar un par de centenares de estímulos para que grupos de todos los Estados de la República hagan giras llevando teatro ahí donde el aparato del estado no llega para atender a públicos diversos: los Espacios Escénicos Independientes. Mismos que malviven y cuyas erogaciones para seguir abriendo telón son a veces imposibles. Por ello ambas Convocatorias son un bálsamo, un tanque de oxígeno que esperamos haya llegado para quedarse. Como política cultural de estado funciona estupendamente. Y lo digo porque me consta y lo escribí el año pasado en este mismo espacio. Estas convocatorias, si se entienden bien (para quien quiera entenderlo), pueden llegar a tener un peso similar al de Teatro Escolar del INBAL (que por piedad URGE que lo doten nuevamente de presupuesto y lo echen a volar).
Me pregunto, a partir de la cita de Borges, ¿por qué no se dieron cuenta el año pasado los hoy enfadados a muerte que los estímulos de ambos Circuitos se llamaban “Premio”. Los leo y entiendo que puede tener una lectura muy forzada de mesianismo o bien de depauperización de la condición de los artistas. Pero, desde el punto de vista legal y administrativo, si hiciesen contrato por cada grupo que va a girar y por cada Espacio autogestivo que va a recibir, los dineros no saldrían sino meses después de finalizados los circuitos. Con ello si ardería Troya y todos tomaríamos las hachas de guerra. Con el perdón de los colegas, la figura administrativa de “Premio” permitió el año pasado que ningún grupo viajara sin los recursos en los bolsillos. Para mí fue ejemplar.
Traspunte
Nuevas funciones por la República
Poco más o menos 2 mil funciones pagadas a los grupos artísticos se darán de septiembre a diciembre en todos los estados de la República este año gracias a ambos Circuitos. Si la fórmula administrativa se llama “Premio”, es lo de menos. No ver las virtudes que tienen en servicio de nuestros conciudadanos es miopía.