El pasado 9 de septiembre el artista Francisco García Leyva comenzó la instalación de una escultura monumental en lo que fueron tierras productivas de un ejido en San Pedro de las Colonias, Coahuila, y que hoy luce yermo.
Con la ayuda de una cuadrilla de diez trabajadores escribió con la palabra “Agua” sobre una superficie de 100 metros cuadrados con 100 toneladas de excremento de vaca. Ahora lo que sigue es la elaboración de un documental.
Este proyecto de escultura monumental tiene como escenario el lecho seco de La Laguna de Mayrán y el artista decidió nombrarlo “Los Hijos del Estiércol”. Asimismo intentó financiarlo a través de una colecta de dinero que llamó El Cacatón, que, en entrevista para MILENIO, refirió que le sirvió como un ejercicio sociológico pues no se reunió la meta económica pero alcanzó para poder movilizar las 100 toneladas de estiércol a la zona.
Con la elaboración de videos publicitarios breves y la confección de un documental, es así como se toma la recta final sobre un trabajo que fue beneficiado mediante el Sistema de Apoyos a la Creación de Proyectos Culturales en la modalidad de Jóvenes Creadores y Medios Alternativos.
“La instalación la hicimos el mes pasado y ya tenemos el registro fotográfico y de video y ahorita ya nos encontramos en la fase de post producción sobre la edición del material. La instalación ya quedó en el ejido Puerta de Ventanillas, al final las letras midieron quince por quince metros, en una extensión de cien metros. Fueron cien toneladas las que se pusieron al final. Se realizó la instalación el 14, 15 y 16 de septiembre”.
Francisco García Leyva agradeció a todos los que integraron el equipo de producción, entre creativos, jornaleros y transportistas, en tanto que dijo, el trabajo de registro fotográfico y de video lo realizó Dudu Hernández.
“La verdad el Cacatón no fue muy redituable porque realmente nos sembró más por la parte de lo publicitario del proyecto pero fueron muy poquitas cosas las que conseguimos por medio del Cacatón, no obtuvimos una gran respuesta, al menos en Torreón porque me he fijado que donde tienen como más conciencia sobre el daño ambiental es en el municipio de San Pedro de las Colonias".
“El Cacatón sirvió como un experimento social a través del arte para poder percibir la cuestión de la publicidad. Hice un kit de medios que mandé a medios nacionales, fuera de la ciudad, no todos respondieron, de aquí de la región casi ninguno. Los que respondieron fueron MILENIO, Telediario, Solidario, Meganoticias y algunos medios alternativos. En sí, medios tradicionales no quisieron apoyarnos pero tenemos en puertas el apoyo de medios de comunicación que se dedican a la difusión de la ecología y la defensa del medio ambiente y la sociedad civil”.
Aunque las críticas no se han hecho esperar sobre este producto artístico debido a que se cuestionan los daños que puede ocasionar al medio ambiente al utilizar el excremento de las vacas, los ambientalistas locales han considerado que el performance, ni aunque el artista lo se lo propusiera, podría dañar más el ecosistema.
Como ejemplo, el ambientalista y doctor en Ciencias, Francisco Valdés Pérezgasga dijo que un establo pequeño puede tener una población de 5 mil vacas, por lo que producirá 250 toneladas diarias de estiércol.
En una región como La Laguna, conservadoramente, el hato lechero produce al menos 25 mil toneladas de estiércol al día, por lo cual se presume que este proyecto cultural va a esparcir el 0.72 por ciento del estiércol que se produce en un día en la zona. Es decir, el 0.0019 por ciento de lo que se produce de estiércol en un año en La Laguna.
Sobre el documental, el artista dijo que podrá ser visto el próximo año pues esperará el próximo ciclo agrícola para poder documentar tanto la dotación de agua para el riego, como el abastecimiento del agua para consumo humano en las comunidades urbanas y rurales para poder cerrar el ciclo, pues García Leyva además ha dado seguimiento a las notas donde se refieren conflictos sociales ante la falta de agua y en algunos casos, los decesos de menores en las zonas marginales.
EGO