Cada 23 de febrero en Ixcateopan, Guerrero, se celebra el natalicio de Cuauhtémoc. En este lugar, se dice, están los restos del último emperador mexica, hallados el 26 de septiembre de 1949.
Sin embargo, el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma aseguró: “No se ha encontrado nada en relación con una evidencia ósea, o de otro tipo, que indique real y fehacientemente que allí fue la ejecución de Cuauhtémoc”.
- Te recomendamos “La poesía política y social te puede llevar a ver realidades”: Jesús J. Barquet Cultura
En la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Ixcateopan “se localizaron supuestos documentos que hablaban de la presencia de sus restos y que, en una zona arqueológica conocida como El Tigre, cerca de Itzamkanac, Campeche, se habló de que había sido el sitio donde se ejecutó al tlatoani”, agregó.
El arqueólogo inauguró las conferencias “Cuauhtémoc: a 500 años de su muerte”, que se celebrarán cada martes, hasta el 27 de agosto, en el Aula Mayor de El Colegio Nacional con la participación de expertos sobre la figura del mexica.
Cada 23 de febrero en Ixcateopan, Guerrero, se celebra el natalicio de Cuauhtémoc. En este lugar, se dice, están los restos del último emperador mexica, hallados el 26 de septiembre de 1949.
Incertidumbre
Matos Moctezuma reflexionó sobre el paradero de los restos mortales del tlatoani. “¿Qué pasó con el cuerpo de Cuauhtémoc? Aquí hay algo interesante, es pura especulación lo que voy a comentar, quizá Cortés entregaría los cuerpos de los dos tlatoanis a los mexicas que iban acompañándolo para que los enterrasen o algo”.
El objetivo de las conferencias es reflexionar sobre el nacimiento de Cuauhtémoc, su genealogía, el nombre, qué implica el nombre del tlatoani, los últimos días de la toma de Tenochtitlan por parte de Hernán Cortés y miles de contingentes indígenas enemigos de los mexicas, hasta llegar a la fecha en que las dos ciudades mexicas, Tenochtitlán y Tlatelolco, caen en poder de Cortés y sus aliados.
Aunque nunca se supo qué pasó con los restos de Cuauhtémoc, excavaciones realizadas por la arqueóloga Eulalia Guzmán Barrón en 1949 sugirieron que se encontraban en Ixcateopan, Guerrero. Sin embargo, una segunda investigación organizada por la Secretaría de Educación Pública determinó que no se podía concluir que los restos óseos fueran del gobernante mexica.
Para Matos Moctezuma, el segundo dictamen desató polémica en círculos políticos, periodísticos e intelectuales. “Diego Rivera declaró que había que fusilar, por traición a la patria, a los historiadores y antropólogos que negaron que los restos hallados fueran los de Cuauhtémoc”.
Polémica
En 1979, Rubén Figueroa Figueroa, entonces gobernador de Guerrero, solicitó al expresidente Luis Echeverría que organizara una comisión para dictaminar que esos sí eran de Cuauhtémoc. “Echeverría ordenó al subsecretario de la SEP y al director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que formaran la ‘Comisión para la revisión y nuevos estudios de los hallazgos de Ixcateopan’”, comentó Matos Moctezuma, quien formó parte de ella.
El antropólogo argumentó que el dictamen final determinó que no había “base científica para afirmar que los restos hallados el 26 de septiembre de 1949 en la iglesia de Santa María de la Asunción Ixcateopan, Guerrero, fueran los restos de Cuauhtémoc, último señor de los mexicas y heroico defensor de México-Tenochtitlan”.
El especialista habló también sobre las prácticas mortuorias del centro de México, las cuales eran diferentes a las de Oaxaca o la zona maya.
“Al tlatoani se le colocaba en una pequeña olla de barro, se le hacían todas sus exequias, muy ricas eso sí, muy suntuosas, se incineraba el cadáver al pie del Templo Mayor y, según algunas crónicas, los restos de esos tlatoanis se colocaban en el Cuauhxicalco, el edificio circular que se encontró frente al Templo Mayor”.
Añadió: “Si acaso Cortés entrega el cuerpo, no iba a permitir que quemaran el cadáver, porque la religión católica lo prohibía, nada de que van a practicar una incineración del cadáver. ¿Qué es lo más probable? Pues que rápidamente hubieran enterrado los cuerpos y vámonos cuanto antes. Pero realmente no se sabe lo que ocurrió”.
El hecho, sin embargo “es que la figura de Cuauhtémoc, emblemática de la historia de México, es muy importante por varias razones. En el siglo XIX es donde hay un resurgimiento de su figura motivado por la Independencia de México que se lograba de los españoles, que eran los que habían vencido, junto con sus aliados indígenas, a Tenochtitlan”, comentó el experto.
El arqueólogo también dijo que el significado del nombre de Cuauhtémoc ha sido mal interpretado: “Se trata de águila que desciende para atacar y no que cae abatida”.
También comentó que “sin pruebas y de manera sumaria, el conquistador español Hernán Cortés ejecutó a Cuauhtémoc y a su primo Tetlepanquetzal, señor de Tacuba, por temor a que se convirtieran en un motivo de alzamiento en la recién caída Tenochtitlan”.
El ciclo de conferencias de El Colegio Nacional continúa hoy a las 18:00 hrs con el tema: “Cuauhtémoc, linaje y legitimidad”, coordinada por Matos Moctezuma con la participación de María Castañeda de la Paz, del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM. Puede verse en YouTube
PCL