Comienza a sentirse el fervor guadalupano

Las calles "se inundan" con vendedores y matachines haciendo sonar sus tambores.

Ya comienzan a llegar las peregrinaciones de 20 a 50 personas. (Foto: Raúl Palacios)
Román Cruz
Monterrey /

Desde hace unas semanas comenzaron de manera oficial las fiestas de la Basílica de Guadalupe, aunque fue en esta semana cuando los vendedores de caramelos y artículos guadalupanos comenzaron a llegar, algunos de diferentes partes del país.

Hoy se vio más gente de lo que un domingo normal del año puede haber. Ya quieren ir por los churros con azúcar, por los hot cakes, por los elotes desgranados y las comidas de los alrededores, justificante para hacer el paseo completo al santuario de la colonia Independencia.

​Aún faltaban los vendedores de colchas o los de pan de nata, faltaban más de caramelos, pero ya estaban de colguijes, veladoras y rosas, por si se le ofrecía pedir el milagro o dejar su recuerdo a los pies de "La Morenita", que está en el estacionamiento. 


Eso sí, ya se ven vendedores estorbando pasos peatonales, incluso en la entrada de la iglesia de la guadalupana. Quizás eso fue un poco por el mercado que domingo a domingo se coloca en la calle Libertad, con todo y su barbacoa mañanera.

Ya comienzan a llegar las peregrinaciones "a carretadas", con 20 personas, con 50, pero no tantas. Apenas comienzan, y ejemplo del caos que causan está la ruta marcada a seguir en señalamientos y que ahora es olvidada, por lo que camiones de pasajeros y autos tienen que ir atrás del desfile de fieles, a paso lento y sin que los agentes de Tránsito pongan un orden porque no lo tiene, no tangible ni real... así durante varias semanas

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