En una pequeña figura de San Miguel Arcángel se narra la historia de la comunidad que le da nombre, una pequeña colonia de Apodaca que la gente llama con cariño “San Miguelito”.
La imagen es custodiada en la parroquia de la comunidad, pero la historia detrás de este San Miguel Arcángel es un misterio al no tener certeza de su origen o procedencia.
Emmanuel Treviño Durán, quien está al frente del Comité Barrio Antiguo de San Miguel, narra cómo sus abuelos don Eustacio y doña Betita Treviño de Treviño, protegieron la imagen desde 1910 en su hogar, en tiempos de la Revolución Mexicana.
La tradición oral entre vecinos narra que la imagen fue traída a la Hacienda de San Miguel por los mismos años de su fundación, en 1747. Se habla que podría tener hasta 400 años y ser unas de las primeras obras de arte sacro en llegar a Monterrey.
“El santo se cuidaba de familia en familia, y ellos se encargaban de hacer la gran fiesta, donde se jugaba a la ‘chiva colgada’, la ‘colgadera’, se rezaba el novenario en las casas, eran fiestas de ocho días”, relata Emmanuel Treviño, cronista adjunto de Apodaca.
Cada 29 de septiembre, la comunidad celebra a San Miguel Arcángel con una misa especial y fiesta en el poblado. En este año, la situación será diferente a causa de la pandemia.
Su misterio
La comunidad Hacienda San Miguel Apodaca hoy se encuentra rodeada de nuevos fraccionamientos, al nororiente del área metropolitana. Aún conserva sus calles estrechas y empedradas, árboles longevos y sus casonas de sillar, con amplios jardines traseros.
Forma parte de las siete haciendas que integraron al municipio junto a Mezquital, Santa Rosa, Encarnación, Huinalá, Agua Fría y San Francisco, además de San Miguel.
No se cuenta con mayor información sobre el origen de la imagen, que no rebasa los 60 centímetros de altura y luce algunos rasgos toscos en su apariencia.
Por parte de la Comisión de Arte Sacro en la Arquidiócesis de Monterrey no se cuenta con un registro que documente las características de la imagen.
“Tengo la impresión de que podría ser una pieza muy antigua, pero ¿de qué periodo? no sé, tendríamos que estudiarla”, explica el padre Raúl Mena, de la Comisión de Arte Sacro de la Iglesia.
Por su parte, el historiador Juan Ramón Garza Guajardo destaca que las primeras dos comunidades con la advocación a San Miguel en el Nuevo Reino de León a mediados del siglo XVII, en lo que hoy es Escobedo y Apodaca.
Barrio Antiguo
Hacia 1940, la familia Treviño levantó una pequeña capilla en la Hacienda San Miguel para la comunidad, misma que permanece en pie y está por cumplir sus ocho décadas. Al interior, cuenta con un mural del artista Carlos José Sánchez Zamora “Kestarco”.
“Este templo es una réplica, en miniatura, del templo de Nuestra Señora de los Dolores en el centro (Monterrey), porque nosotros vivíamos ahí muy cerca. Ha sido una tradición el estar resguardando esta imagen en mi familia”, comenta Treviño Durán.
Con la denominación de Barrio Antiguo de Apodaca, San Miguel busca ser un centro cultural e histórico para ser visitado por los regiomontanos. En la actualidad, están por culminar los trabajos de remodelación de su plaza y acceso principal.
“La idea es que toda la gente que está llegando a vivir a Apodaca, que aquí les tocó conseguir su casa por cualquier cosa, conozcan la historia y tradiciones del municipio, al final aquí van a vivir”, agrega el cronista adjunto.