Guadalupe Sanjuan Pérez se confunde entre el grupo de hombres que se preparan para formar parte del desfile Carnavalero en Calnali, el municipio que ha compartido la tradición de su personaje emblemático del “Cuernudo”, y es con un grupo de estos que inicia el recorrido por algunas calles del centro del municipio, pero Guadalupe también está también ahí vestida de “Cuernuda”.
Ella tiene 27 años, nació en Calnali, pero desde pequeña, su familia se fue a vivir a la Ciudad de México en donde creció, estudió y actualmente se dedica a enseñar en una escuela secundaria de la colonia Providencia en la delegación Gustavo A. Madero.
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"Siempre me gustó ver a los Cuernudos y de pequeña nunca pude participar porque, a pesar de que mis papás son de aquí, nos fuimos a la ciudad, pero siempre regresamos en las vacaciones de Semana Santa, cuando mis primas y tías nos platicaba cómo había estado el carnaval”.
"Desde hace cinco años participo activamente dentro de esta fiesta, disfrazada de Cuernuda, pero participé disfrazada de otros personajes como de Caperucita Roja o de policía y ya después de Cuernuda, por lo que soy pionera de que la mujer también pueda vestirse para caracterizar a este personaje", indicó Guadalupe.
Originalmente, siempre ha habido grupos de mujeres que forman parte de la tradición de este municipio, enclavado en la Huasteca, pero veían lejana la oportunidad de ser uno de ellos por ser mujer.
"Antes solo había grupos de mujeres que se disfrazaban de otros personajes, pero a partir de hace cinco años que nos atrevimos, ya hay mujeres. Actualmente, somos como cinco mujeres por cada barrios, porque así nos dividimos en el municipio para participar en este encuentro, en esta fiesta", dice orgullosa.
Guadalupe es la mayor promotora de su cultura y de las tradiciones de Calnali en CDMX, y es a sus alumnos a los que comparte esta identidad de su municipio.
"Pedí permiso en mi escuela para asistir a participar, por lo que llegamos un día antes del carnaval por la noche y nos regresamos hoy para estar mañana temprano y no faltar a mi trabajo, pero no dejaría de asistir a mi Carnaval”.
"Es sentido de pertenencia a las tradiciones, a una comunidad y a la cultura, no es sólo platicarle a los chicos de alguna tradición, ni de algo que haya investigado, sino que ya lo vivo y es algo muy enriquecedor poder compartirlo", añade.
Guadalupe va acompañada de su pequeña sobrina a quien desea trasmitirle el orgullo de portar el traje de Cuernuda y del significado que tiene para la identidad de la comunidad y de este municipio que vive, siente y arropa sus tradiciones.
"Mi sobrina es de aquí y está integrada a las tradiciones y ella desfiló con sus compañeros y está creciendo dentro de esta gran tradición que tenemos en el municipio y que es parte esencial de la identidad de nuestro propio estado", concluyó.