Del orgánico mobiliario imaginado por Salvador Dalí a los oníricos videoclips de la islandesa Björk, el pensamiento surrealista ha influenciado el diseño durante casi un siglo, mediante una evolución que el Design Museum de Londres despliega en una compleja exposición.
Bajo el título Objetos de deseo: surrealismo y diseño de 1924 a la actualidad, la muestra, que abre el viernes 14 de octubre, recibe al visitante con una de las más famosas representaciones de la psique humana: Metamorfosis de Narciso, pintado por Dalí en 1937.
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El artista español leyó La interpretación de los sueños de Sigmund Freud cuando estudiaba en Madrid en los años 1920 y sus teorías sobre el subconsciente impactaron toda su obra.
En 1938 por fin conoció al neurólogo austríaco en Londres, gracias a su mecenas británico Edward James, con quien desarrolló una fructífera colaboración que abre esta exposición.
Del célebre teléfono en forma de langosta, al sofá con los labios de la actriz Mae West, pasando por un pie de lámpara hecho con copas de champán o una silla con brazos humanos, Dalí creó numerosas piezas de mobiliario para la casa del poeta británico.
Pero incluso antes que él, a principios del siglo XX el arquitecto modernista Antoni Gaudí ya había "intentando dar a objetos que podían ser puramente funcionales un empuje emocional y un impacto psicológico cambiando las formas hacia algo mucho más orgánico y emocional", explica la comisaria Kathryn Johnson.
Mobiliario, cine, moda
Nacido en la literatura antes de pasar a las artes plásticas, el surrealismo decayó como movimiento artístico a principios de los 1950, pero pervivió en el diseño.
Y algunas de sus creaciones "parecen haber encontrado realmente su lugar en este siglo", afirma Johnson.
Es el caso de una lámpara de pie quebrado encargada a Dalí en 1937, que fue considerada demasiado vanguardista para el mercado en su momento y debió esperar hasta 2019 para ser manufacturada.
Este "diseño inesperado" en objetos de cada día sigue más vigente que nunca, muestra la exposición: desde una enorme lámpara sobre un caballo de plástico del estudio sueco Front (2006) hasta un sillón compuesto por peluches de Mickey Mouse creado por los brasileños Fernando y Humberto Campana (2007), pasando por dos lámparas con crines de caballo del británico Jonathan Trayte (2022).
Pero si Dalí llevó el surrealismo al cine y la moda, en colaboraciones con Walt Disney en los años 1940 y Christian Dior en los 1950, este siguió evolucionando también en esos ámbitos.
Así, la joven modista británico-nigeriana Yasmina Atta creó en 2020, en plena pandemia, prendas inspiradas en el afrosurrealismo, como un top de lana con alas de mariposa activadas por un mecanismo eléctrico.
"La creó durante el confinamiento y pienso que capta esa sensación de intentar volar lejos de esta situación de estar atrapados en un lugar", afirma Johnson
Necesario en tiempos convulsos
Nacido como reacción a los horrores de la Primera Guerra Mundial y la pandemia de gripe de 1918, el surrealismo resurge en los convulsos tiempos actuales, defiende la exposición.
"No es casualidad que estos momentos coincidan con periodos de inestabilidad económica y política, porque el surrealismo se fundó como un abrazo creativo al caos, acepta la incertidumbre, lo inexplicable y creo que es necesario ahora", considera la comisaria.
En el plano audiovisual, videoclips de temas como Utopia, Mutual Core y Hidden Place, creados por diferentes directores entre 2001 y 2017 para Björk, muestran oníricas relaciones entre humanos, naturaleza y tecnología.
E incluso las extrañas imágenes generadas por una inteligencia artificial "pueden resultar en un tipo diferente de arte", asegura Johnson.
"La inteligencia artificial está modelada sobre el funcionamiento del cerebro y no nos sorprende que pueda ser creativa, es fascinante ver qué puede salir de ahí", agrega.
Pero aunque la muestra también recoge icónicas fotografías como Le violon d'Ingres de Man Ray (1924), para Mateo Kries, director del Vitra Design Museum en Alemania -de donde provienen muchas de las piezas expuestas- el surrealismo "hoy ya no es un movimiento artístico, sino una actitud hacia el arte y el diseño".
hc