Daymé Arocena, la santera que hace jazz dictado por musas

A sus 26 años, Daymé Arocena ya es reconocida como una de las promesas de la música. Originaria de La Habana, su estilo mezcla ritmos cubanos con jazz que adereza con una voz impresionante. Esto le ha valido la comparación con una de sus paisanas, Celia Cruz, y una de las cantantes de soul más importantes de la historia, Aretha Franklin.

Sin embargo, ella sabe que aún le falta mucho que recorrer pues “ellas son diosas y yo soy una principiante en este camino”, dijo en entrevista con MILENIO.

La cubana, que habló con nosotros a través de una llamada de WhatsApp que a momentos se cortaba por lo limitado que está el uso de internet en la isla, se dijo contenta de poder visitar una vez más México y de ser parte del Carnaval de Bahidorá que se realizará este fin de semana. Daymé dijo que ésta será una segunda buena oportunidad para conocer a su público, pues la primera vez tocó en un festival en la Ribera Maya a las tres de la mañana, cuando hay una vibra diferente. 

“Es una puerta certera para en esa tierra que nos ha dado tantas oportunidades a los cubanos. Muchos de los músicos que yo respeto y admiro de mi Cuba se han hecho famosos en México. Creo que es un país que ama los artistas, que ama a los músicos”, dijo. 

Selena Quintanilla, Daymé y sesiones espiritistas

Se podría decir que Daymé es el ejemplo perfecto de que los cubanos llevan el ritmo y la música por dentro. Cuenta que ninguno de sus padres se dedica a la música y el único acercamiento en su familia era su abuelo, que era trompetista, pero nunca tuvo contacto con él pues murió cuando ella aún era muy pequeña.

Sin embargo, señala que su infancia coincidió con una época bastante difícil en Cuba, cuando los apagones de electricidad eran comunes. Durante ese tiempo, sin nada qué hacer, su familia aprovechaba para hacer música con cucharones, golpes en la mesa y cantos. Fue así como nació su amor por la música.

“Desde muy chiquita yo me encerraba en el cuarto y ponía los casetes de los BeeGees o de Selena, de quien yo era muy fanática. Mi abuela decía le iba a hacer una misa espiritual a Selena porque creía que se me había prendido su espíritu. Lo mío con la música es una cosa muy loca”.

La música espiritual y honesta de Daymé 

Y en efecto, la relación de Daymé con la música es loca y llena de energías. La cubana, practicante de la Santería, asegura que lo suyo con la religión se dio principalmente por la música que utiliza y su interés por los ritmos folklóricos. Pero sin ella, no podría escribir ni una sola canción, pues es gracias a sus “ondas espirituales” que sus musas le ayudan a escribir.

“No soy de las compositoras que intenta componer porque siento que las canciones son regalos que llegan a mí solos. Yo no las busco. Sigo las energías de los espacios y los momentos. […] Hay canciones que me llegaron a los 17 años y las estoy terminando ahora porque me he despejado de todas esas energías”, comentó. De ahí que la cubana califique a su música de honesta y sincera. 

mrf