"La cultura no es un adorno que se abre al final, tiene que sobrevivir", directora del Hay Festival Qro

La directora del festival literario, Cristina Fuentes La Roche, habló sobre las adaptaciones que harán del 1 al 5 de septiembre

La cultura no se tiene que abrir al final, dice la directora del Hay Festival Querétaro
Jesús Alejo Santiago
México /

El Hay Festival se ha consolidado como un encuentro literario, un tanto editorial, y también por concentrar espacios de reflexión sobre los problemas de nuestro tiempo, a partir de las reuniones entre algunos de los pensadores más importantes en distintos campos de la vida. Es literatura, sí; también ciencia y tecnología, y entre 2020 y 2021, la salud ha sido una de las preocupaciones más importantes.

Surgido en una pequeña localidad galesa, Hay-on-Wye, de unos dos mil habitantes, desde hace más de tres décadas se convirtió en un punto de encuentro y, al mismo tiempo de salida, para una serie de festivales que se desarrollan en diversas partes del mundo. En México, su historia empezó en Zacatecas, pasó por Xalapa, un año en Ciudad de México y ahora en Querétaro.

¿Cómo se ha reinventado Hay Festival por la pandemia?

Ha sido un año muy difícil para todos, con efectos en todos los sectores. En lo cultural ha sido muy afectado porque ha sido poco priorizado por los gobiernos. La cultura es algo que, en muchos lugares, es lo último que se ha abierto, ha habido poco apoyo y necesitamos un sector cultural fuerte, diverso, construido con pequeñas y grandes manifestaciones, así que espero que sobreviva.

Nosotros hemos tenido relativamente suerte porque somos una organización pequeña que crece mucho durante el festival, y hemos encontrado la fórmula digital que ha sido muy interesante. Ha sido un gran aprendizaje. En el último festival, en Colombia, llegamos a un millón de personas; fue muy especial, notamos que la gente se une a escuchar la charla, las conversaciones, y también participa y se siente parte de una comunidad. Desde el Hay Festival Querétaro del año pasado, Perú, México y Colombia, hemos llegado a dos millones de personas.

Es importante reactivar al sector cultural y que acompañe al cambio, a los procesos en los vivimos: la cultura no es un adorno que se abre al final, cuando está todo resuelto, tiene que sobrevivir”.

Se habla de la importancia que tiene el arte y la cultura, ¿hasta qué punto se da esa relevancia?

En países, como Alemania, se contempló la cultura como un bien de primera necesidad; en otros no tuvo apoyo. Está todo por verse. Es muy importante que existan las culturas diversas, las pequeñas manifestaciones que hacen cosas especiales y diferentes, para que sobrevivan las grandes actividades. El pensamiento, la conversación, la cultura nos aglutina, nos hace conversar, nos hace pensar en conjunto. La cultura genera empatía, colaboración, te ofrece el punto de vista de los demás: se convierte en una herramienta fundamental para todo lo que viene, cuando podremos salir adelante, trabajando en conjunto todos los países. Por mucho que nos cuidemos en lo individual, si no se cuida el vecino no hay nada que hacer. La cultura conecta, nos hace dialogar e imaginar otras realidades, por eso es muy importante apoyar al sector.

En 2020 se cambiaron las formas del Hay. ¿Qué tanto se ha incrementado el desafío?

El arte de la conversación se presta relativamente bien a estas plataformas digitales, pero hay otras manifestaciones, como la danza o el teatro, que se presta menos; la palabra compartida y el momento de diálogo puede ser compartido por muchos. No reemplaza el encuentro cara a cara, aunque funciona bastante bien dentro de lo que cabe. Ha sido interesante la experiencia, el desafío fue ver si lográbamos el apoyo… vimos que tenemos socios que comparten nuestra visión y vieron la importancia de continuar; ha sido muy satisfactorio ver que miles de personas se unieron a esta aventura digital.

La conversación es eje central del Hay, ¿de qué manera le ha servido a la sociedad, hoy?

Lo que hacemos tiene algo de entretenimiento. La cultura te llena a nivel espiritual y la conversación de temas que son fundamentales para todos, como cambio climático, perspectiva de género o innovación científica, nos hace generar mucho más entendimiento y pensamiento crítico, además de conectarnos los unos con los otros. La cultura, el arte y la conversación son semillas que pueden generar mucho cambio: quizá no cambian al mundo, pero sí apoyan ese cambio, porque la cultura en general cohesiona, genera conexiones y, en el fondo, hemos podido sobrevivir sin salir a restaurantes o de compras, pero no sin buenos libros, música o series.

Cada edición del festival busca responder a la coyuntura, ¿cómo responder a los retos?

Siempre hemos tenido una programación de temas globales, de grandes ideas, con mayúsculas, y de forma transversal se habla de asuntos coyunturales. En muchas de las charlas que hemos planeado, la pandemia estará presente. Habrá charlas de los grandes de la literatura, a través de las cuales hablaremos del ser humano y del momento en particular en que vivimos. Por ejemplo, estará presente Elizabeth Colbert, ganadora del Pulitzer por su libro La sexta extinción, es una gran conocedora de los efectos del cambio climático y en su nuevo libro trata sobre cómo el ser humano manipula la naturaleza para protegernos. Tendremos también a Las tesis, el colectivo chileno que hablará sobre cómo la pandemia ha afectado más a las mujeres. Somos un festival de grandes temas; los coyunturales se presentan a lo largo de la programación.

¿La gente extraña un festival ya presencial?

Tiene muchas ganas de reunirse, de verse, eso es algo intrínseco del ser humano. En el puro gozo cultural del festival está la idea de escuchar en una misma habitación y preguntar al autor… la parte física del encuentro es muy importante, es la suma de las actividades y la concentración en las calles, las cenas, las sobremesas, las ideas entre amigos… es fundamental. Somos animales sociales y nos necesitamos unos a otros, más allá de que se haya reducido nuestro mundo, hace falta volvernos a sentir ciudadanos globales. _

y además...

El reencuentro con los lectores

La edición 2021 se pensó con una perspectiva híbrida, con lo cual 20% de sus actividades será presencial: todos los conciertos y 33 talleres y charlas.

Se reconoce que lo virtual ha sido importante, tan solo el Hay Festival Cartagena de Indias 2021 recibió a poco más de un millón de espectadores. En 2020, Querétaro contó con más de 300 mil visitantes.

Las luces de la fiesta. Presencia híbrida

Aun en forma digital, la mayor parte de las miradas del Hay Festival Querétaro se mantienen: las reflexiones editoriales, los diálogos sobre temas coyunturales, las disecciones científicas y, por supuesto, mucha literatura: Jean Marie Gustave Le Clézio, Amin Malouf, David Grossman, Svetlana Alexievich, Javier Cercas, Muriel Barbery, María Dueñas, Pilar Quintana, Juan Gabriel Vásquez, Santiago Roncagliolo, Andrea Chapela, Aura García Junco, Rosa Beltrán, Fernanda Melchor, Juan Villoro, por mencionar a algunos.

En lo científico se plantea la participación del neurólogo argentino y doctor en Ciencias Facundo Manes, las científicas e investigadoras mexicanas Margarita Teresa de Jesús García Gasca y Carla Santana Torres, el catedrático de Astronomía de la Universidad de Harvard, Avi Loeb, también miembro del Academics of Arts & Science y director de proyectos de astronomía y astrofísica, que, en 2012, fue seleccionado por la revista Time como una de las personas más influyentes del año por sus investigaciones sobre el espacio exterior.

​bgpa

LAS MÁS VISTAS