Y érase una vez una editorial llamada Alfaguara. Todo inició en octubre de 1964 como un sueño del constructor español Jesús Huarte que estuvo bajo la dirección de los hermanos Camilo José, Juan Carlos y Jorge Cela Trulock.
En entrevista con MILENIO, Mayra González Olvera, directora literaria de Alfaguara, dijo: “La reflexión para quienes estamos celebrándolo en este momento es de vértigo. Es ver el legado, a nuestras y nuestros antecesores. Somos guardianes de ese catálogo que se ha construido desde 1964 y al mismo tiempo hay que poner nuestro granito de arena con lo que vayamos sumando durante nuestra gestión”.
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A pesar de celebrar 60 años, González considera que Alfaguara es un sello joven y vital que “sigue dictando canon, dictando una cierta garantía para los lectores. Cuando llegan a un libro de Alfaguara a veces no saben nada del autor o incluso de la novela, pero el sello mismo les da ese sentido de seguridad, de saber que van a encontrar algo interesante, una propuesta válida y muy trabajada desde lo editorial”.
“¿Qué hay que hacer para conservar la vitalidad de estos 60 años y seguir teniendo en la conversación nuestro fondo editorial? Que los nuevos lectores se sigan topando con Saramago, con Fuentes, Grass, Cortázar. Al mismo tiempo nos preguntamos cuál es el aporte que vamos a hacer con el cambio generacional, con las nuevas historias que se están contando y las voces que se están sumando a nuestro catálogo”.
González dice que el espíritu de Alfaguara no es solo publicarle un libro a los escritores sino que se sumen al catálogo, “los vamos a estar acompañando en una carrera literaria y no solamente con un título”.
Cambio y permanencia
En 60 años, la industria editorial ha cambiado mucho. Al respecto, González opinó sobre que lo más complicado es “encontrar en la cantidad de manuscritos que nos llegan esas novelas que nos asombran, porque podemos hablar de calidad literaria, de que los personajes estén bien construidos, que la historia no se caiga y tenga una lógica, pero más allá de que estén bien hechas, lo que buscamos es que sean una gran sorpresa para el lector. Es el reto que tenemos entre todo el ruido que hay, tenemos que seguir concentrados en identificar esas lecturas y esas conversaciones abiertas con los lectores”.
González dijo que pertenecen a un grupo muy importante desde hace 10 años, pero que buscan trabajar de manera artesanal. “Evidentemente no se puede ocultar al gran pingüino (Random House) al que pertenecemos y del que estamos muy honrados en formar parte. Somos una editorial mainstream muy grande, pero al mismo tiempo, el reto es, de acuerdo con lo que nos enseñaron nuestros antecesores, continuar la labor artesanal, la cercanía permanente con el autor, hacer esa lectura minuciosa y hecho el libro y entregado en librerías, continuar con el acompañamiento de los autores”.
La editorial celebrará todo el año, lo primero fue una edición que se llama “Érase una vez Alfaguara”.
“Es un libro precioso cuya portada es idéntica a aquellas que concibió Enric Satué, esa primera estética de Alfaguara. Son 40 entrevistas que hace el gran editor Juan Cruz, quien estuvo en el momento en que Alfaguara ya miraba hacia Latinoamérica, cuando se abre el espíritu panhispánico. Fue el gran promotor para que esto sucediera y las dos orillas se estuvieran hablando, desde los primeros autores hasta los últimos que se han ido sumando a nuestro catálogo, hablan de su relación con el sello y de sus procesos creativos, inspiraciones y todo lo que tiene que ver con su con su trabajo creativo”, comentó.
Además los editores de Alfaguara eligieron títulos para una colección especial y única.
“Con el dolor que tenemos los editores, cuando entre todas nuestras joyas tenemos que elegir representativas de épocas y de países. Son ediciones únicas como La carne, de Rosa Montero; Retorno 201, de Guillermo Arriaga; Todas las almas, de Javier Marías, o el El pintor de batallas, de Arturo Pérez-Reverte, entre muchas otras que ya están en las librerías”, dijo la editora.
Para finales de año, la editorial realizará una mesa de cierre de celebraciones en la FIL Guadalajara con una reflexión sobre el aniversario. “Se espera que sea un cierre emotivo y, al mismo tiempo, la continuación de una aventura que comenzó hace 60 años con la publicación de Viaje al Pirineo de Lérida, de Camilo José Cela”, dijo González.
Historia y autores
Han pasado 60 años y en el catálogo de la editorial están los nombres de Julio Cortázar, Juan José Millás, Marguerite Yourcenar, Javier Marías, Thomas Bernhard, José Saramago, Günter Grass, entre muchos otros.
El Premio Alfaguara de novela se relanzó en 1998 y en 2014 se integró a Penguin Random House Grupo Editorial, algo que le dio una importante presencia en España, Portugal, México, Colombia, Perú, Chile, Argentina, Uruguay y Estados Unidos.
Actualmente, en sus filas resaltan nombres como Enrique Serna, Beatriz Rivas, Jorge Vopi, Alma Delia Murillo y David Toscana, entre otros.