Patti Smith se monta en un escenario y parece dominarlo todo con pocos gestos desde las alturas. No es su primera vez en México, pero mira alrededor y actúa asombrada como si lo fuese.
Este fin de semana está de visita en Querétaro como una de las figuras estelares en el cartel del Hay Festival 2018. Viene a ofrecer el recital poético Hecatombe, acompañada de su inseparable guitarrista, Lenny Kaye, pero también —confiesa— a “expresar su solidaridad con los mexicanos”.
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Lleva una venda en el dedo anular de la mano izquierda que le impide tocar la guitarra, de modo que no hay música esta mañana. Pero la diva del underground no necesita acordes para mantener la lealtad a las causas que defiende:
“Tenemos una crisis ambiental causada por la avaricia de la gente y los gobiernos que no quieren hacer un cambio porque representaría un sacrificio”.
Dice esas palabras con un tono que bordea lo contradictorio, porque se sabe parte de un país con “un presidente al que no le importa el medio ambiente, que cree que no es un problema. Vivimos en una atmósfera de negación, pero eso no significa que nosotros como personas tratemos de hacer el cambio”.
El cambio climático no es el único conflicto social que cruza su mente, también el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y los métodos anticonceptivos que utilizan.
“Las mujeres siempre han tenido que sufrir por todo. En mi país lucharon por el [derecho] al voto, por la equidad, para tener decisiones sobre el aborto… Todas esas cosas han sido una lucha continua. Estuve en Buenos Aires, donde estaban luchando por la despenalización del aborto y, aunque no fue exitoso, seguirán luchando. Les recomiendo que no se unan sólo entre mujeres. Encuentren buenos hombres que se les unan, porque no deben pelear esto solas. Mientras más nos unamos, más éxito tendremos".
La gente tiene el poder: el inspirador poema de Patti Smith
Música sin etiquetas
Es fácil imaginar a Patti Smith disfrutando de su legado, de la música hecha por las generaciones, posteriores a la suya, que bebieron de su sonido. Sin embargo, a ella no le importan los estereotipos, ni siquiera musicales.
“No importa cómo lo llames, siempre y cuando construyas una voz cultural que exprese poesía, revolución, energía sexual o intelectual y te la pases bien. Lo importante es que haya comunicación entre la gente y los músicos”, cuenta.
También se dio tiempo para reivindicar el género que consolidó. “Al principio no lo llamábamos punk, sólo era nuestra manera de trabajar. Una simple canción de amor puede mover a la gente para solidarizarse. Las letras exitosas son las que comunican algo a la gente, como amor, lucha o unión”.
Además de presentar Hecatombe, el 8 de septiembre por la mañana Patti Smith tendrá una conversación con Diego Rabasa, editor de Sexto Piso, sobre la trayectoria literaria que se ha construido de manera paralela a la musical.
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