Ya no hay mariachis, estamos en extinción”, comenta entre risas un joven de 26 años fuera de un pequeño cuarto que funge como la oficina de un grupo de músicos.
Solo cuatro de los cerca de 10 centros de contratación quedaron tras la época dorada de la zona; en aquellos tiempos hasta los turistas acudían al “Triángulo” para probarse con los trajeados. A finales de los 90’s era por todos sabido que si un mariachi querías contratar, la plaza donde se reunían a cantar debías visitar.
En el 2005, durante la última administración de Fernando Azcárraga López y con la colaboración de la iniciativa privada, en el lugar ubicado en la calle 20 de Noviembre y Genaro Salinas, fueron colocadas tres estatuas de mariachis sobre un pedestal. También se realizaron trabajos de rehabilitación en la plaza, así como de pintura y alumbrado en los alrededores.
Al realizar un recorrido por el lugar es posible observar comerciantes de abarrotes transitando de un lado a otro con su mercancía; personas, en su mayoría indigentes, acostados en las bancas color verde y dormitando bajo la sombra de los árboles; un autobús foráneo estacionado frente al monumento de los músicos, mismo que a simple vista se encuentra en buen estado a pesar de carecer de la placa que tenía hace un par de años y que recordaba el nombre de la Plaza “Los Mariachis”.
El busto en homenaje al compositor del corrido “Tampico Hermoso”, Samuel Margarito Lozano, luce sin daños, sin embargo, está sucio debido a la exposición a la intemperie.
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EVT