Una misión arqueológica checa ha encontrado al sur de El Cairo una tumba de unos 25 siglos de antigüedad, coincidente con el inicio de la dominación persa de Egipto, perteneciente a un líder militar que tenía el cargo de "jefe de soldados extranjeros", informó hoy el ministerio de Antigüedades y Turismo egipcio.
La tumba fue hallada en la zona arqueológica de Abu Sir, en el sur de la región de Guiza, aledaña a la capital y donde se encuentran también las famosas pirámides de Keops, Kefrén y Micerino, y "podría pertenecer al periodo final de la dinastía XXVI e inicial de la XXVII", en el siglo VI antes de Cristo, según un comunicado del Ministerio.
El pozo principal de esta estructura tiene seis metros de profundidad, unas dimensiones de casi 14 por 14 metros y está dividido en varias partes separadas por puentes excavados en la roca, añadió la nota, según la cual la tumba, pese a presentar semejanzas con otras halladas cerca, tiene características únicas.
En su parte inferior, a una profundidad de 16 metros, fue descubierto el doble sarcófago perteneciente a Wahipra Merinit, que ostentaba el inusual cargo de jefe de soldados extranjeros, indicó la nota sin dar más precisiones sobre este rango.
El ataúd estaba algo dañado, cubierto de arena y vacío, ya que, según los estudios preliminares realizados, el cementerio en el que se encontraba en enterramiento fue saqueado probablemente alrededor de los siglos IV y V de nuestra era, afirmó el jefe de la misión checa, Marslav Barta, en el comunicado.
Los saqueadores hicieron un agujero en uno de sus lados y rompieron la parte superior, hecha de basalto y con la representación de la cara del fallecido, para expoliarlo y en su interior solo fue encontrada una figura de un escarabajo con la representación del corazón del finado.
En la parte superior del sarcófago había un fragmento del Libro de los Muertos.
También fueron localizados en la tumba algunos objetos funerarios como un amuleto para apoyar la cabeza y unas 400 pequeñas figuras que representaban al dueño de la tumba.
El subdirector de la misión, Mohamed Mujahed, apuntó por su parte que este es un hallazgo importante porque ofrece una nueva perspectiva de una etapa muy convulsa para el antiguo Egipto, en la que comienza la dominación persa del país.
Además, añadió que los restos encontrados permiten deducir que Wahipra Merinit murió de manera inesperada, por lo que su tumba y el ajuar funerarios no estaban completos en el momento de la inhumación.
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