La Metropolitan Opera de Nueva York estrena Agrippina, a tres siglos de que Georg Friedrich Händel la compusiera, con una de las cantantes más reconocidas de la década, la mezzosoprano estadounidense Joyce DiDonato, quien cantó ya en dos ocasiones en Palacio de Bellas Artes.
La premiere de la sátira política y social sobre la madre del emperador Nerón, que cometió crímenes para llevar a su hijo al trono de Roma y que después fue asesinada por éste, se transmitirá en vivo vía satélite desde Nueva York a unos 2 mil teatros de 70 países el próximo sábado 29 de febrero, a las 12 horas, en tiempos del #MeToo, y podrá verse en la gran pantalla del Auditorio Nacional y en la sala Julio Bracho del Centro Cultural Universitario de la UNAM, en Ciudad Universitaria.
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La producción está a cargo de sir David McVicar, quien ya ha trabajado con DiDonato en otras óperas transmitidas por la MetOpera en su serie Live in HD, como Norma, de Vincenzo Bellini, que contó con la estadounidense en el papel de Adalgisa, acompañando a Sondra Radvanovsky, o en 2013 Maria Stuarda, de Gaetano Donizetti, la mezzo en rol protagónico de la reina escocesa.
Agrippina representa también el regreso de Joyce DiDonato a las transmisiones en vivo de la casa neoyoquina desde la temporada 2017-2018 en que participó antes de Norma también en la producción de Cendrillon (Cenicienta), la ópera de Jules Massenet, a cargo de Kristine McIntyre.
La mezzosoprano y activista estadounidense es reconocida por su talento musical y dramático, así como por su búsqueda de hacer del arte “una forma de sanar”, al presentarse en campos de refugiados y prisiones de máxima seguridad. La cantante especializada en roles de Händel y Mozart ha sido descrita por The New Yorker como “la voz más potente de su generación”.
La ganadora de múltiples premios Grammy y del Olivier Award en 2018 recientemente protagonizó Agrippina, en la puesta en escena realizada por la Royal Opera House. En la MetOpera también participa en esta temporada en el elenco de la monumental producción de Werther (2020) conducida por Yannick Nézet-Seguin, y para la de 2020-2021, será la protagonista de la ópera del siglo XXI, Dead Man Walking, de su compatriota Jake Heggie.
En México DiDonato es ya bastante conocida no sólo por sus participaciones en las transmisiones en vivo por la MetOpera de Comte Ory (2011), María Stuarda (2013), La Cenerentola (2014), Norma (2017) y Cendrillon (2018). También estuvo en la 30 edición del Festival Cultural Alfonso Ortiz Tirado en Álamos, Sonora, en 2014, y ese mismo año dio su primer recital en febrero en Bellas Artes, donde interpretó Canciones clásicas españolas, del catalán Fernando Obradors, arias de Rossini, Mozart, Johan Adolph Hasse, Alberto Ginastera, Canciones de Venecia, de Reynaldo Hahn, y del Giulio Cesare, de Händel.
Dos años más tarde, el 30 de abril de 2016, volvió a Bellas Artes, para interpretar piezas de Pablo Luna, Maurice Ravel, Rossini, Enrique Granados, Pergolesi, Giordani, y del Rinaldo, de Händel.
Montaje contemporáneo
Harry Bicket estará al frente de la Orquesta de la MetOpera, que el lunes pasado anunció que emprenderá su primera gira en dos décadas, que incluye Alemania, Inglaterra y Francia.
La puesta en escena se traslada de la Roma de los Césares a un contexto contemporáneo en la producción de Sir David McVicar, quien en 2015 también montó en el Teatro Real de Madrid otra ópera clásica en versión actualizada, La Traviata, con la soprano albanesa Ermonela Jaho.
El elenco que acompaña a DiDonato en esta puesta en escena incluye a la mezzo Kate Lindsey (Nerone), la soprano Brenda Rae (Poppea), los contratenores Iestyn Davies (Ottone), ganador de dos premios Gramophone y un Grammy, y Nicholas Tamagna (Narciso); el barítono Duncan Rock (Pallante) y el bajo Matthew Rose (Claudio).
Con esta puesta en escena Rae y Tamagna realizan su debut en el Met de Nueva York.
El director concertador Harry Bicket es un reconocido especialista en interpretaciones de la música del barroco y el clásico temprano, además de haber sido organista y clavecinista.
Agrippina fue estrenada el 26 de diciembre de 1709 en el teatro San Giovanni Grisostomo de Venecia e inmediatamente se convirtió en un éxito. Según el biógrafo de Händel, John Mainwaring, hubo 27 funciones consecutivas de la obra, prueba de su gran recepción.
Sin embargo, es una de las óperas menos representadas en la actualidad, a tal grado de que en dos siglos de existencia de la MetOpera y que Agrippina se estrenó hace más de tres siglos, la casa neoyorquina apenas acaba de incluir a su repertorio, aunque esta producción ya estuvo en Europa.
Una curiosidad es que el tema de la película de Sylvester Stallone, Rocky, está basado en un fragmento de la ópera de Händel.
La obra, que cuenta con libreto en italiano de Vincenzo Grimani basado en el libro histórico Anales del gobernador del Imperio Romano Cornelio Tácito, aborda temas como la traición marital, el machismo, la corrupción, la sucesión familiar del poder, la ambición y la tradición política del “fin justifica los medios”.
La historia relata la ambición de poder de la emperatriz romana Agrippina, hermana de Calígula, quien a partir de mentiras y manipulaciones pretende conseguir que Nerone, hijo de un matrimonio anterior, despoje del trono a su actual esposo, el emperador Claudio. A lo largo de la obra intervienen diversos personajes, algunos para facilitar y otros para obstaculizar las pretensiones de esta mujer.
Los políticos Narciso y Pallante, dos personajes poderosos de Roma protegidos por Claudio, aceptan ayudar a Agrippina a cambio de favores sexuales, mientras que el soldado Ottone frena sus intenciones al ser nombrado por el mismo Claudio como su sucesor en el trono. No obstante, sólo la joven hermosa y suspicaz Poppea —quien está envuelta en un triángulo amoroso entre Claudio y Ottone— será capaz de equilibrar el desorden pasional y político de la historia.
Georg Friedrich Händel (1685-1759) es uno de los compositores alemanes más importantes de la época barroca, principalmente reconocido por sus óperas, oratorios y composiciones instrumentales. Escribió el oratorio más famoso de la historia, El Mesías (1741), así como las piezas Water Music (1717) y Music for the Royal Fireworks (1749). Además de Agrippina, Handel escribió otras óperas exitosas como Rinaldo (1711), Teseo (1713), Floridante (1721) y Giulio Cesare (1724), las cuales consolidaron al autor como el rey de la ópera italiana en Londres.
La nueva versión de Agrippina ha sido aclamada en las representaciones que ya ha tenido en Europa y en la MetOpera donde ya inició temporada.
La puesta en escena de David McVicar resalta por una monumental escalera dorada colocada en el centro del escenario, que es dirigida a un trono del mismo color. A pesar de estar situada y basada en un contexto del pasado, la obra cuenta con una ambientación completamente actualizada en la cual predomina el uso de la tecnología, las nuevas tendencias de la moda, el humor negro y la comedia slapstick.
La primera producción de Agripina realizada por McVicar fue estrenada en el Teatro Real de la Moneda en el año 2000, bajo una óptica anclada a esa época. La actual puesta en escena que se estrena ahora en el Met es una nueva apuesta por revitalizar esta historia y traerla al presente, en la que se muestra el cambio tecnológico e ideológico de los últimos 20 años.
Dos ejemplos: se incluyó el uso de teléfonos inteligentes y la obra ha redimensionado a Poppea para reflejar el panorama post #MeToo, con un personaje más asertivo y complejo que en la versión original. También se eliminaron escenas de acoso sexual que existían en la versión original.
El equipo creativo, además, incluye a cuatro figuras del arte operístico británico: además de McVicar y el director concertador Harry Bicket, están el escocés John Macfarlane a cargo de la escenografía y el vestuario, y el galés Andrew George, en la coreografía.
lnb