Los niños y las niñas de hoy no tienen presentes a los trompos, los yoyos o los baleros; tampoco han tenido contacto con juguetes elaborados en madera, hojalata, cartón, barro o las tradicionales muñecas de trapo. Son piezas que forman parte de otro imaginario y que, por lo tanto, se encuentran en peligro de extinción porque ya tienen poco uso, asegura la antropóloga Amparo Rincón Pérez.
“Vemos con preocupación que el juguete artesanal mexicano se encuentra en riesgo, por falta de consumidores pequeños; ciertamente, se sigue fomentando el juego y el juguete, pero para las nuevas generaciones, sobre todo en el ámbito urbano y en la Ciudad de México, esto ha ido en franco declive”.
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Para la coordinadora de Arte Popular de la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas (DGCPIU), de la Secretaría de Cultura, no solo es que la infancia conozca poco o no juegue con la misma intensidad que hace algunos años con estos juguetes tradiciones, “en parte por falta de conocimiento y también por el encierro debido la pandemia de covid-19”, sino que tampoco existen ciertas condiciones de convivencia.
Frente a esa realidad, a partir de hoy y hasta el 1 de mayo se llevará a cabo la segunda edición de la Feria Artesanal del Juguete Popular Mexicano en los patios del Museo Nacional de Culturas Populares, en la cual participarán artesanos y artesanas de 12 estados del país, donde aún se conservan muchas de estas tradiciones.
En ese sentido, el juguete popular cumple una función social, de recreación, pero también de aprendizaje y hasta de enriquecimiento del lenguaje. Sin embargo, es un patrimonio cultural que lamentablemente se ha ido diluyendo entre las nuevas generaciones, lo que pone en riesgo a los jugueteros mexicanos, pues si ya no hay demanda, el artesano que vive de esta actividad deja de producir.
“En otros tiempos había hasta concursos de yoyo, frases muy populares como ‘échate este trompo a la uña’ o cuando terminabas ‘chiras pelas’, en referencia a las canicas. Como institución nos corresponde fomentar este saber tradicional que se ha mantenido durante siglos y buscar la manera de que no desaparezca”.
La feria busca celebrar a los niños y a las niñas, pero también abrir espacios para la reactivación de la economía de las y los artesanos participantes, afectados por la pandemia, enfatizó Amparo Rincón; además de la expoventa, se desarrollarán conversatorios, presentaciones de libros y talleres que invitarán a la interacción entre los artesanos, los juguetes y las infancias.
La Feria Artesanal del Juguete Popular Mexicano en el Museo Nacional de Culturas Populares se realizará en el Patio Jacarandas de este recinto, ubicado en Avenida Hidalgo 289, colonia Del Carmen, en Coyoacán.
PCL