La participación de España como país invitado a la edición 2024 de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, además de mostrar la diversidad del país Ibérico, reforzó el vínculo entre ambas naciones, que es "mucho más fuerte que cualquier cuestión a nivel político", afirmó Inmaculada Ballesteros, directora de Programación de Acción Cultural Española.
"Más allá del momento político que pueda haber en cada uno de los países, siempre nos vamos a sentir hermanos, eso es lo más importante y se ha demostrado en esta Feria", comentó la experta en políticas culturales en entrevista con MILENIO.
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Ballesteros acentuó que se cumplieron los objetivos que España tenía planteados con su programación cultural para la FIL Guadalajara: "Mostrar una imagen diversa y salir de la zona de confort que se puede plantear a la hora de hacer una propuesta de música, artes visuales o para los niños, buscar algo que sorprenda y permita conocernos mejor".
Destacó que en el Foro FIL, espacio musical de la Feria, trajeron "artistas que representan la diversidad lingüística de nuestro país, que cantan en gallego o euskera", como la cantautora SÉS o la leyenda vasca Ruper Ordorika.
"Y hemos intentado fusionarlo con artistas mexicanos, como hizo Rodrigo Cuevas con Los Cojolites. Hermanar un poco más no solo en lo tradicional, sino en lo que somos de una manera más amplia".
Inmaculada Ballesteros acentuó que la programación musical, gastronómica e infantil fue importante para demostrar que el país ibérico "tiene presencia en otras disciplinas artísticas. Es un camino de ida y vuelta, por eso el trabajo conjunto con México y agradecerle todo lo que nos ha dado".
— Aprovechando este mundo de libros, ¿qué entiendes por 'cultura'?
— La cultura es el territorio de lo posible, es donde nos encontramos, hablamos y dialogamos. Es donde podemos resolver cualquier tipo de conflicto. Al final, vamos a escuchar al otro y somos capaces de encontrar diálogos. Hay que dejar que siga siendo el territorio de la libertad de expresión, donde podamos comunicarnos abiertamente y sin miedo a ser rechazados para poder conocernos y encontrar vías de diálogo.
— ¿Cuál es la estampa más emotiva que te llevas de esta FIL Guadalajara?
— Me ha gustado mucho cuando vienen artistas nuevos. Me llevo el respeto con el que el público de Guadalajara ha tratado a nuestros artistas, se ha acercado a valorar la propuesta artística, a engancharse con eso, a aplaudirlo. Eso los jóvenes y también personas mayores, que han admirado la calidad de nuestros músicos; hemos establecido un diálogo intergeneracional, que es importante porque construye sociedad y nos fortalece.
Al cierre de la breve charla con MILENIO, la directora de Programación de Acción Cultural Española, lectora ferviente de Julio Cortázar, revela que se lleva una buena pila de libros a casa: "He intentado buscar autores que no tengamos en España y tengo unas maletitas que he sacado del Fondo de Cultura Económica".