Homenaje a Armando Partida

El viernes pasado se llevó a cabo un homenaje en línea a uno de los teóricos y críticos de teatro fundamentales del siglo XX en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM: Armando Partida Tayzán.

El viernes pasado se llevó a cabo un homenaje en línea a uno de los teóricos y críticos de teatro fundamentales del siglo XX en la Facultad de Filosof
Jaime Chabaud Magnus
Ciudad de México /

El viernes pasado se llevó a cabo un homenaje en línea a uno de los teóricos y críticos de teatro fundamentales del siglo XX en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM: Armando Partida Tayzán. La iniciativa de la Coordinadora de la carrera de Literatura Dramática y Teatro, Iona Weissberg, llega afortunadamente en vida. Mucho debe esa facultad a los más de 50 años de carrera docente, administrativa e investigativa de Armando. La doctora Frances Rodríguez, Emilio Méndez, Aimée Wagner, Oscar Armando García, Germán Castillo y el de la voz, emprendimos un recorrido incompleto sobre el vasto mapa de la vida de este incomparable maestro de teatro.

Formado en la URSS en los años 60 del siglo XX, Armando se convirtió en uno de los teóricos que introdujo el estructuralismo y la semiótica teatral en el análisis de la escena mexicana de los años 80 y 90. Ello produciría una nueva camada de críticos de teatro muy alejados de aquello que abundaba en las páginas de cultura y espectáculos del diarismo tradicional. Fundador de la segunda época de las revistas La Cabra, Escénica y Artes Escénicas al lado de su aliada de décadas Josefina Brun, fue impulsor de las publicaciones especializadas y del estudio de calado profundo sobre nuestro teatro.

Como traductor del ruso y del francés ha sido un constante manantial de materiales desconocidos en Latinoamérica en su momento: Lem, Bulgakov, Stanislavsky, Lotman, Paporov y, entre otros, Kurguinian. Por su traducción del Cantar de las huestes de Igor Armando Partida nos hizo sentir profundamente orgullosos en 1985 cuando se le otorgó la Medalla Pushkin por su labor como divulgador y estudioso de la literatura rusa. Lector de las primeras obras de mis contemporáneos, lo llevaría a realizar la primera cartografía de una generación de dramaturgos ya no instalada en el pleito dramaturgo-director. Generación de ruptura que también realizaba exploraciones fuera del realismo imperante o bien, como decía en sorna Julio Castillo, “del rete realismo mexicano”.

Traspunte

Cuatro siglos de obras teatrales

Tuve el honor de acompañarlo en la titánica aventura de dar nombre y sentido a veinte volúmenes de obras teatrales de cuatro siglos de nuestra tradición: diez de la época novohispana y diez del periodo entre guerras 1810 a 1910. La colección se llamó Teatro Mexicano. Historia y Dramaturgia, hoy agotada.

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.