En un acto en el que participaron periodistas de 16 países, de todos los continentes, se lanzó la más reciente novela del escritor británico Ken Follet, Las tinieblas y el alba, la precuela de Los pilares de la tierra, uno de los grandes éxitos en venta: 43 millones de ejemplares en todo el mundo y definido como referente del género de la novela histórica.
“El relato de la novela es cómo una ciudad pequeña, un pueblo, se transforma en un lugar próspero, con una catedral y un mercado, y cómo la prosperidad llega a la ciudad, sobre todo el conflicto entre los que querían avanzar y quienes no aspiraban al progreso, aquí ambientado hace mil años”.
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En Las tinieblas y el alba (Plaza y Janés, 2020) el escritor sitúa la historia en el comienzo la Edad Media, durante el final del primer milenio: el ocaso de una época violenta y brutal, pero también el inicio de un nuevo tiempo, a partir de los sueños de un joven constructor de barcos, que están a punto de convertirse en pedazos por un ataque vikingo en la costa inglesa.
“En la historia, el imperio de la ley no existía, porque hubo un tiempo en que la gente pensaba que se merecía esa justicia, necesitaban tenerla y luchaban por ella; resulta que esto resuena un poco con la situación actual, porque la supremacía de la ley y del gobierno que la aplica se han visto cuestionados, cosas que dábamos por hecho desde hace siglos, ‘nadie puede estar por encima de la ley’, ahora vemos que gobiernos de todo el mundo se están cuestionando el imperio de la ley”.
Si bien se dijo convencido de que los libros no deben tener mensajes, a menudo un drama histórico tiene resonancias en el mundo actual, lo que no deja de ser importante para todo relato, más allá del tiempo o la geografía en la que estén situadas.
“Un thriller, una novela de suspenso o una histórica no son tan diferentes desde mi punto de vista. Es cierto que mi enfoque es muy similar en esos casos: siempre tiene que haber algo para que el lector quiera pasar la página. Eso es lo importante y en las novelas históricas eso puede ocurrir perfectamente: el proceso no es muy distinto en un caso o en otro”.
De Los pilares de la tierra, Ken Follet alcanzó ventas de alrededor de 27 millones; a esa novela le siguieron Un mundo sin fin y Una columna de fuego; ha vendido 170 millones de ejemplares de los 32 libros que ha publicado en 80 países en 33 idiomas.
La búsqueda de libertad
Uno de los aspectos que destaca Ken Follet de Las tinieblas y el alba es la búsqueda de la libertad, un objetivo que lo ha acompañado a lo largo de su bibliografía, a sabiendas de que siempre se puede ir dos pasos hacia adelante y uno hacia atrás.
“En el siglo XV y en el XVI la religión generaba muchas guerras y ese fue un movimiento que avanzó a trompicones, porque la lucha para la libertad de religión duró mucho tiempo, mucha gente murió, mucha gente fue torturada y quemada. Al final se fue avanzando y, en la mayor parte de los países europeos esto se da por hecho.
“Sí que vamos avanzando, aunque a veces parezca que vamos hacia atrás, y yo espero que lo que estamos viendo ahora con el populismo, el aumento del racismo en muchas partes del mundo, con esos ataques a la democracia y al imperio de la ley, sea nada más que ese paso hacia atrás que necesitamos para dar esos pasos hacia adelante”.
Al final, dijo el escritor británico, estamos en un momento difícil de nuestra historia, pero aún espera que su descendencia pueda decir que la segunda parte del siglo XX y el principio del XXI fue un periodo de avance.
PCL