En 1986, Ute Lemper grabó el disco Ute Lemper Singt Kurt Weill, editado en 1987 por Decca, en cuya portada luce desparpajada con el pelo teñido de rojo, sentada en un sillón del mismo color. Hoy la artista alemana sigue cantando con pasión la música de Weill, referente fundamental de su carrera.
De hecho, en 1985 grabó otro disco con música de Weill, acompañada por un piano, dice en entrevista con MILENIO. “Lo grabé en un estudio pequeño en Alemania. Se trata de un LP, digamos privado, que fue escuchado por Decca Universal en Inglaterra y así como empezó este proyecto de grabar toda la obra de Kurt Weill. Fui la protagonista de todo el proyecto que inició con Ute Lemper Singt Kurt Weill, al que siguió un volumen 2, The Three Penny Opera, Seven Deadly Sins y otros discos.”
La cantante vendrá a la Ciudad de México para presentar Los siete pecados capitales, de Kurt Weill, con la Orquesta Sinfónica Nacional los días 2 y 4 de septiembre en el Palacio de Bellas Artes. En los conciertos también participará el Hudson Shad Quartet, integrado por los cantantes Mark Bleeke, Timothy Leigh Evans, Eric Edlund y Peter Becker.
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En retrospectiva, Lemper evalúa la importancia de su primer disco oficial. “Era todavía la época de la guerra fría y fue grabado en Berlín, en un estudio que estaba a un lado del muro, con la Orquesta Sinfónica de la Radio de Berlín, dirigida por John Mauceri. Yo era muy joven, por supuesto, y era un mundo completamente distinto: el mundo estaba estructurado de una manera diferente: los países eran diferentes, las culturas eran diferentes, los problemas políticos eran diferentes”.
Para la cantante, el álbum significó un “renacimiento de la música de Kurt Weill para el mundo. Fue la primera vez que fue acogida después de la segunda guerra mundial, la lengua alemana también fue acogida después del tiempo de los nazis. Fue un tiempo importante para traer a la vida nuevamente la cultura de la República de Weimar y recordar que hubo una cultura extraordinaria antes de que fuera destrozada por los nazis.”
—¿Cómo ha cambiado su forma de interpretar estas canciones?
Todavía amo cantar estas canciones, Weill es todavía la esencia de mi repertorio, mi identidad artística. Por supuesto ya no tengo 23 años, sino 53 –dice entre risas–. Han pasado 30 años y todavía me siento como un volcán, como cuando era muy joven. Siento que todavía tengo el fuego de la vida, la pasión por la vida, la misericordia por la vida y por la gente de cualquier parte. Me interesa el destino de la gente. Todavía resulta muy interesante cantar estas canciones, me siento muy conectada con ellas.
—¿Qué puede decir de Los siete pecados capitales?
Recuerdo 1986, cuando estudiaba esta música en Berlín y estaba fascinado por ella. Treinta años después canto este fragmento de historia en todo el mundo. Es una de las mejores obras de Kurt Weill: la escribió cuando tenía 33 años y estaba exiliado en París, se había terminado su periodo alemán. La pieza, su última colaboración con Bertolt Brecht, es una suma de todo el capítulo de composiciones sobre Alemania. Diría que es su máxima obra de ese periodo.
—¿Dónde diría que escribió sus mejores obras, en Alemania o en Estados Unidos?
Por supuesto que en Alemania fue mucho más original. Fue un periodo de composiciones verdaderamente revolucionario. Apreció su vida en Estados Unidos, el país que lo recibió y le permitió ser, incluso pudo hacer obras para Broadway. Sin embargo, creo que lo que escribió en Estados Unidos tuvo que adaptarse a la tradición estadunidense, no era original. Tuvo que olvidarse de las composiciones revolucionarias de Alemania.
—Buena parte de su repertorio habla de personajes en situaciones extremas, ¿qué ofrece esto a quienes escuchan las canciones?
Estas canciones son el alma del mundo, el alma de la vida y por eso toda la gente se conecta ellas. La gente se conecta con la tragedia, la opresión, la búsqueda de la libertad, la humanidad y la justicia. Cuando hago conciertos, especialmente con un repertorio que se acerca a estos problemas, siento que es algo muy puro, muy directo. En nuestra sociedad de entretenimiento, de música pop y de distracción sin freno de la televisión y el cine, brinda un momento de sosiego en el que te conectas de manera universal a la existencia humana que estas canciones son capaces de lograr.
—¿Cómo cree que reciben esta música las nuevas generaciones?
La cultura ha cambiado, lo veo con mis hijos. Ellos crecieron en una cultura muy diferente, con una sensibilidad diferente hacia la música. Sin embargo, las generaciones más jóvenes no tienen sensibilidad hacia esto porque están escuchando cosas muy diferentes. Pero siempre esperas que la ópera va a sobrevivir, lo mismo que las sinfonías y las orquestas. Espero que, en cierta forma, la cultura sobreviva para que esta música llegue a un nuevo siglo.
- Discografía selecta
Ute Lemper Singt Kurt Weill (1987)
The Seven Deadly Sins (1990)
Ute Lemper Live: Ihre Grossen Tournee-Erfolge (1991)
The Michael Nyman Songbook (1991)
Chicago (1998)
Punishing Kiss (2000)
Paris Days, Berlin Nights (2012)
Forever: The Love Poems of Pablo Neruda (2013)
The 9 Secrets (2015)
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